Mientras nadie conoce los resultados de la encuesta que el PRI mandó a hacer con la empresa Demotecnia, de María de las Heras, Grupo Editorial Status ha financiado una encuesta estatal sobre preferencias electorales, en donde se miden a los principales aspirantes a la candidatura de PRI y PAN a la gubernatura del estado.
El ejercicio fue realizado por el Buró de Estrategias y Análisis del Poder, encabezado por Rodolfo Rivera Pacheco, sin duda alguna la empresa encuestadora más precisa y acertada de toda la región.
Los resultados, si bien reflejan la opinión de votantes potenciales en un instante determinado, muestran tendencias interesantes que, más allá de posturas particulares o de la inevitable subjetividad de los siempre infaltables análisis “a la medida”, ubican a cada uno de los que intentan suceder a Mario Marín en su justa realidad.
Les guste o no.
De entrada, los números reflejan que la contienda electoral del próximo año, por lo menos en lo que a la gubernatura del estado se refiere, será de pronóstico reservado.
Los aspirantes con mayores posibilidades de ganar en sus respectivos partidos, se encuentran en empate técnico en lo que a intención de voto se refiere.
Rafael Moreno Valle encabeza la lista con un 24.6% de las preferencia, seguido por los priistas Enrique Doger y Javier López Zavala con un 23.6%.
Lo anterior indica que cualquiera de los dos precandidatos del tricolor podría ser competitivo ante una potencial candidatura del hoy senador blanquiazul.
Es decir, a pesar de que en varias ocasiones y desde distintas trincheras políticas y periodísticas se le ha emitido al ex alcalde un precipitado certificado de defunción electoral, la encuesta muestra con contundencia que, por lo menos en este proceso, Enrique Doger está más vivo que nunca.
Inclusive, tal y como se esperaba, su principal activo político se encuentra en la capital del estado y en los municipios conurbados a la ciudad de Puebla.
Ahí, Doger es el priista mejor posicionado con el 34.4% y el 34% respectivamente, lo que no es poca cosa si se considera que es esta zona la que más votos aporta al total del padrón electoral.
Sin embargo, la debilidad del ex edil se da en zonas del estado consideradas como “bastiones• del PRI, como son los municipios de la mixteca poblana y de la sierra norte.
La realidad de López Zavala es completamente contraria.
Los números indican que necesita con urgencia reforzar su estrategia de posicionamiento en la ciudad de Puebla, en donde la intención de voto a su favor es de sólo 21.5%, pero que va creciendo de manera importante en relación a sus competidores, cuando se mide en municipios conurbados (28.4%), en la mixteca (20.1%) y tiene su punto cúspide en la zona norte con un contundente 30.2%.
Sin embargo, lo verdaderamente interesante de lo que nos enseña la encuesta en lo que a López Zavala se refiere, es que, por primera vez en la historia moderna de Puebla, un gobernador tiene un “delfín” con posibilidades reales de ganar una elección.
Manuel Bartlett no lo tuvo con José Luis Flores, ni Melquiades Morales con Germán Sierra.
Así lo reflejaban las encuestas en su momento.
Los números condenan a Jesús Morales (7.6%), a Víctor Hugo Islas (5.6%) a Jorge Estefan (3.8%) y a Alberto Amador (3.1%) a apurar sus respectivas negociaciones para anunciar cuanto antes su declinación a favor de alguno de los punteros como estrategia única de supervivencia en la política poblana.
Por cierto, a pesar de ser una encuesta que mide a aspirantes a Casa Puebla, tiene sin duda consecuencias claras para el proceso priista de selección a su candidato a la presidencia municipal de la capital.
Mientras Doger se muestra como el más fuerte en este rubro (34.4%), en el caso de Jorge Estefan los números indican que no sería la mejor carta para el PRI en lo que a la presidencia municipal de Puebla se refiere, al obtener ahí sólo un 4.6% de la intención de voto total.
Lo anterior, servirá sin duda como referencia para ubicar en su justa dimensión a quienes integran la numerosa baraja tricolor de aspirantes a la alcaldía.
En el caso del PAN, los números confirman lo que de antemano se ha manejado hasta la saciedad: Moreno Valle es la única opción real que tiene ese partido para poder aspirar seriamente a ganar, por primera vez en su historia, el gobierno del estado.
Rafael tiene buenos números en prácticamente todo el territorio poblano.
En relación a sus contrincantes, el senador aparece bien posicionado en la capital (22.1%); en municipios conurbados (28%) y en la mixteca (26.9%) y la sierra norte (24.7%).
Es, de todos los aspirantes, el que presenta niveles más similares de intención de voto entre zonas geográficas.
La encuesta descarta prácticamente a Ana Tere como candidata con posibilidades reales de ganar, al aparecer muy lejos con sólo 13.2%, y a Humberto Aguilar Coronado, quien prácticamente ocupa el último lugar con sólo 3% del total.
La Doña, sin embargo, en el tema de la alcaldía de Puebla, mantiene niveles aceptables de intención de voto en relación a los demás personajes medidos (13.2%) y le iría mucho mejor en caso de decidirse por algún municipio conurbado a la capital (21.5%).
Ahí están los números y su inevitable interpretación.
Más allá de filias y fobias personales, vale la pena recordar que se trata del resultado de un estudio aplicado siguiendo un riguroso método probado científicamente y que tiene como único objetivo el predecir el comportamiento de un universo, en este caso conformado de votantes potenciales.
Es por lo tanto, una herramienta muy valiosa para la toma de decisiones.
Nada más.
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