Por: Jesús Manuel Hernández
Los asesinatos han empezado a dejar de ser noticia en Puebla, lo mismo sucedió con los suicidios y los feminicidios. La inseguridad que antes sólo se vivía en determinadas zonas se ha generalizado.
Los asaltos a cuentahabientes o comercios de cierto prestigio, a mano armada también forman parte ya de lo cotidiano.
Hace seis años sucedió algo similar, se culpaba al crimen organizado no poblano de ser el causante y de que Puebla se había convertido en el tiradero de cadáveres de los estados vecinos.
Algunos piensan que la plaza está siendo negociada, que las mafias apuestan al cambio de gobierno para reposicionarse en el dominio de la entidad, otros piensan que el Gobierno no tiene ningún interés en solucionar el problema de la inseguridad.
El verdadero interés que pasa por la cabeza, que domina las horas del día, del gobernador, es posicionarse para ser ampliamente conocido y que en los nuevos sondeos que se hagan su nombre aparezca cercano al de Margarita Zavala. Y ese objetivo demanda del tiempo, del interés de todo el equipo.
Tal vez por eso lo del robo a los jugadores argentinos hace una semana despertó tal enojo que retumbaron los cerros de Loreto y Guadalupe.
Lo que podría haber sido una fiesta para la afición y un evento de proyección nacional, acabó por divulgar a Puebla como una ciudad insegura donde hasta en las habitaciones de los hoteles de lujo roban.
Y es que eso del partido de futbol entre México y Argentina era toda una oportunidad para proyectar a Rafael como candidato presidencial. Hasta mantas colgando de algún palco aparecieron “Rafa Presidente”, ¿de quién habrá sido la ocurrencia?
Tal vez del mismo que al inicio del partido y luego del fracaso en el porcentaje de asistencia al estadio, sacó de su palco al Director de Protección Civil del Estado con una llamada telefónica y le ordenó que con su gente bajará a toda velocidad a los aficionados que se encontraban en las rampas, pues “había muchos huecos”.
Por suerte no hubo incidentes, la gente se movilizó más o menos bien.
Lo importante para Rafa es la foto, que se vea que convoca, aunque con lo del robo le hicieron un gran hueco a su gestión y demostró la vulnerabilidad de la entidad en materia de seguridad.
O por lo menos así me lo parece.