Por Shanik David
Los mensajes que ha dado el gobernador Rafael Moreno Valle en sus giras por otros estados de la república, en reuniones con supuestos militantes de Acción Nacional, en los cuales asegura que su gobierno es humanista dista de lo que se vive en Puebla en la actualidad, pues no sólo no es humanista, sino que ni siquiera se puede llamar panista, sentenció Juan Carlos Espina Von Roehrich.
“No todo humanista es panista, pero todo panista es humanista” recordó el exdirigente de Acción Nacional en el estado y señalar que en el caso concreto de Moreno Valle no se cumple ninguno de los dos escenarios y que incluso ni siquiera se puede considerar como un gobierno democrático.
Describió por ejemplo que no se puede considerar una administración panista porque a lo largo del sexenio y a pesar de los numerosos cambios que se han hecho de la estructura administrativa la presencia de representantes del PAN en el gabinete ha sido escasa.
Y en cuanto a que sea un gobierno humanista fue firme al decir que no se cumple con esto pues
“no busca el bien común, no propicia la solidaridad ni fomenta la subsidiariedad; desde mi humilde punto de vista ni siquiera es democrático porque no respeta el estado de derecho, no respeta los derechos humanos, hay hay división de poderes, no fortalece la transparencia y el sistema de partidos políticos está más corrompido”.
Sin embargo, en su discurso en sus recorridos por otros estados busca dar la imagen de que cumple a cabalidad con los principios de Acción Nacional en sus reuniones públicas, las cuales han sido justificadas bajo el argumento de que son los propios panistas de otros estados los que lo invitan para que hable de lo que ha hecho en Puebla.
Pero para Espina Von Roehrich no hay una certeza de que en realidad quienes acuden a estas reuniones sean militantes del PAN, por lo que comentó que más allá de buscar posicionarse al interior del partido para afianzar su postulación para la elección de 2018, estos recorridos tienen como objetivo promover su imagen en otras entidades con gente fuera del panismo.
En este sentido, indicó que el punto no es cuestionar si esta estrategia es efectiva, porque sí lo es, sino lo que se debe poner sobre la mesa es si es ético.
