Por: Valentín Varillas
El gobernador Moreno Valle convocó a lo más compacto de su grupo político a una comida urgente, para tratar el tema electoral de cara al proceso del próximo año.
Una sola preocupación motivó el evento: la enorme y persistente fractura que hay en su equipo, una vez que ha quedado claro que no existe más candidato que el alcalde José Antonio Gali Fayad.
Y es que, en los hechos, existe todavía una gran resistencia por parte de algunas figuras del morenovallismo, a aceptar que la única carta electoralmente competitiva para el 2016 la representa un personaje que hasta la fecha consideran “ajeno” a aquella burbuja que se formó en la Secretaría de Finanzas en el sexenio de Melquiades Morales.
El encono y la división, lejos de aminorar, ha crecido peligrosamente, al grado de poner el riesgo la continuidad del régimen.
Ya en el evento, el mensaje fue clarísimo: “pierde Gali y perdemos todos”.
El mandatario estatal ordenó que cada uno hiciera lo que le corresponde desde su particular trinchera, en aras de facilitar la victoria en las urnas y dejar a un lado caprichos e intereses personales.
Es un asunto de auténtica supervivencia.
El escenario planteado por Moreno Valle a sus pupilos dista mucho del optimismo mostrado apenas hace unos meses, cuando consideraba que el triunfo de Tony era en los hechos una cuestión de mero trámite.
Es más, los invitó a tener listo un Plan B en un escenario de emergencia política, sobre todo a quienes tienen o tuvieron en su momento alguna responsabilidad en el manejo de recursos públicos.
“Un cierre ejemplar” fue uno de los términos que más utilizó el mandatario, dando a entender de paso que no metería las manos por nadie en caso de irregularidades comprobadas o inclusive en el inicio de procesos administrativos y hasta penales.
Los morenovallistas están conscientes de que ellos rompieron los protocolos no escritos de la “cortesía” entre gobernadores, al encarcelar a Alfredo Arango, quien fuera Secretario de Salud en el sexenio de Mario Marín.
Saben que si pierden la “mini”, los poblanos le exigirán al ganador otra cabeza a exhibir en la plaza pública.
El triunfalismo adelantado del grupo en el poder se rompió por varios factores, que poco a poco fueron erosionando la confianza en el futuro electoral del alcalde de la capital.
Primero, el pésimo resultado obtenido el 9 de junio pasado en 3 de los 4 distritos con cabecera en la ciudad de Puebla.
A pesar de ser los consentidos, los incondicionales y de no haber escatimado recursos humanos y financieros en sus campañas, perdieron vergonzosamente.
También influyó la designación de Manlio Fabio Beltrones como líder nacional del PRI y la urgencia que tendrá de demostrar que el presidente no se equivocó con su nombramiento, intentando ganar para su partido la mayoría de las 12 gubernaturas que estarán en juego el próximo año, sobre todo recuperar aquellas que gobierna la oposición.
Informes, encuestas y mediciones que descansan en el escritorio de la oficina principal de Casa Puebla muestran también una enorme inconformidad ciudadana ante políticas públicas que han afectado su economía y suprimido libertades y derechos como el de manifestarse o el de disentir.
Por eso, el peor escenario para ellos sería enfrentar lo anterior con un equipo dividido.
El mandatario sabe de los grupo al interior, quiénes los forman y bajo qué lógica se mueven.
Le llamó la atención sobre todo la nueva alianza de beneficio mutuo formada entre Luis Maldonado Venegas y Jorge Aguilar Chedraui y el hecho de que Patricia Leal, la otrora institucional aliada, se haya convertido en la más furibunda “anti-Gali” de todo el equipo.
Ahora bien ¿qué alcances reales tuvo la reunión?
¿Se puede considerar que cumplió los objetivos?
De entrada, parece difícil alcanzar una unidad por decreto, cuando los intereses y apetitos personales en juego son muchos y muy grandes.
Sin embargo, un buen indicador para medir lo anterior puede ser una frase que dijo Jorge Aguilar Chedraui un par de días después del llamado de unidad del gobernador: “mi único objetivo real de aquí a diciembre será recomponer mi relación con Tony”.
¿Todavía se podrá?