En la columna de Alejandro Mondragón, publicada el 19 de noviembre del 2014, titulada “Desvían cuotas; asesores de lujo en nuevo sindicato de Ayuntamiento poblano”, quedó constancia de cómo Ziehl Loera estaba detrás de los desvíos de las cuotas de los trabajadores del sindicato “Benito Juárez” para favorecer préstamos personales y otros enjuages en el recientemente creado sindicato “Ignacio Zaragoza” que ostenta el contrato colectivo de los trabajadores del Organismo Operador del Servicio de Limpia.
En tanto que en la entrega del 21 de noviembe del año pasado, le comenté cómo estaba la disputa por el control entre ambos sindicatos: por un lado con Erick Ziehl Loera operando en el sindicato Ignacio Zaragoza y por el otro lado, Héctor Hernández Sosa, jefe de la oficina de la presidencia, a favor del sindicato Benito Juárez.
Otra de las irregularidades denunciadas en su tiempo en contra de Erick Ziehl es que era el principal promotor de la guerra sucia en contra de Guillemo Arechiga, titular de la Secretaría de Gobernación Municipal, posición a la que aspiraba Ziehl desde el principio, y que en su momento fue considerado por el propio alcalde Tony Gali.
Este jueves trascendió que el motivo del cese inmediato de Erick Ziehl fue por encabezar una red de funcionarios municipales que incurrieron en actos de corrupción y extorsión en contra de ciudadanos y, curiosamente, los principales señalados operaban en el OOSL y en Gobernación Municipal, dependencias en donde el ahora es secretario particular había extendido su influencia.
Ahora que se ha destapado la cloaca de corrupción que imperó en la secretaría particular, han comenzado a salir otras lindezas del inefable Ziehl Loera, como el hecho de que durante los primeros meses de la administración, él era el encargado de darle la última revisión a los currículums de las personas que obtuvieron el visto bueno del presidente municipal y enviarlas a las difrentes oficinas a las cuales el edil los había designado.
Sin embargo, no todos los nombramientos que Gali Fayad había indicado inicialmente se cumplieron, pues Erick Ziehl se encargó de disponer de algunas plazas para incondicionales suyos, sin que el edil se enterara, situación de la que apenas se está poniendo al corriente.
Pedrito se queda sin oficina
Otro movimiento cantado es la desaparición de la ínfima oficina de Gestión de Fondos, a cargo de Pedro Gutiérrez.
En este mismo espacio se documentó el malestar del propio Gali y su equipo cercano por la imposición de Pedro Gutiérrez en su gabiente, a orden expresa del gobernador Rafael Moreno Valle.
Sin embargo, la más férrea oposición que enfrentó Gutiérrez, amanuense del senador Javier Lozano Alarcón, fue de la bancada de regidores panistas, compuesta en su mayoría por conservadores, quienes no le perdonan aún a Pedrito la jugarreta que hizo al término de la administración de Eduardo Rivera de falsificar documentos que perjuicaron al edil panista.
Los regidores albiazules Juan Carlos Espina, Oswaldo Jiménez, Adán Domínguez y Guadalupe Arrubarrena habían solicitado antes la renuncia de Gutiérrez y la desaparición de su oficina por la falta de resultados, en un intento por cobrarle a Pedro la traición a Rivera.
Tarde que temprano, tal parece que ahora sí pudieron cobrar revancha de los agravios cometidos en el pasado, pues el edil ha anunciado la desaparición de dicha oficina que nunca llegó a ser secretaría, tal como lo quería Pedro, lo había avalado el mandatario Rafael Moreno Valle y lo pretendía operar Mario Riestra.
Aunque el futuro de Gutiérrez en la comuna es incierto, por lo menos en un par de meses tendrá el tiempo completo para operarle los asuntos al senador Javier Lozano Alarcón, como invariablemente lo hace en el Italian de Zavaleta.
