Someter a votación la suerte de los eventuales fue idea del sindicato; la empresa automotriz ya tenía decidido no recontratar eventuales.
En los siete primeros meses ya habían salido mil 300 eventuales y nadie intercedió por ellos. Sólo se realizó una “feria de empleo”, coordinada por la Secretaría del Trabajo y Competitividad (Secotrade), con una baja respuesta de los obreros que ya estaban sin empleo.
Pero restaban mil 700 eventuales, el Sindicato -que dirige Antonio Flores Trejo-“intercedió” por ellos ante la empresa así se propuso el esquema de 4×3, con el que supuestamente conservarían el empleo y los basificados sacrificarían sólo dos días de aguinaldo y los demás días que descansaran en los próximos cinco meses se tomarían a cuenta de vacaciones o días festivos del próximo año.
La opción se dio en vísperas del inicio de negociaciones por el aumento salarial de 2013.
Ni en el contrato colectivo de trabajo ni en los estatutos del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz de Volkswagen (Sitiavw) se estipula que debe haber una “consulta” ni que se someta a votación el futuro de los eventuales.
La empresa es libre de renovar o no los contratos de los eventuales de acuerdo a sus necesidades de producción, y sólo notifica al Sindicato si renovará o no contratos de eventuales, cuántos y por cuánto tiempo.
Pero ajustar o no la jornada laboral para defender a los eventuales sí dependía de la base no de los líderes.
Si la dirigencia sindical quiso quedar bien con la base, lo logró a medias.
Así, la responsabilidad social del futuro de los eventuales quedó en manos del sindicato y de los propios obreros, no de la empresa.
El resultado de la votación de la semana pasada ya se conoce: saldrán por lo menos mil eventuales en las siguientes semanas. Aunque podrán retornar en 2014 si aumenta la producción en la armadora alemana.
En cualquier empresa, no sólo en VW, es obvia la denominación de “trabajador eventual”; cumple una función y es contratado por determinado tiempo; se le puede renovar o no el contrato, sin que esto interfiera con la labor de los trabajadores permanentes.
Pero en VW todo apunta a que los eventuales son una “moneda de cambio”, la cual se torna más visible en épocas de negociación salarial o contractual. Y este año no fue la excepción.
Aunque tal expresión la rechaza su dirigente sindical Trejo Flores cuando declaró a esta reportera que “Nuestros compañeros tienen contrato por tiempo determinado; con tiempos complicados en el sector automotriz, sabían que no había forma de evitar (su salida)”.
Con la votación sobre los eventuales, la dirigencia sindical se presentó ante los trabajadores como defensora de las plazas (de base y eventuales) hasta el último minuto, y en el ambiente está la percepción de que hará su máximo esfuerzo por lograr un aumento salarial acorde a sus necesidades, durante las negociaciones que inicia hoy lunes.
Además, los mismos trabajadores confirmaron lo que ya sabían: que el panorama para la industria automotriz y en especial en VW está complicado, pero no tan difícil.
Ni el Comité Ejecutivo del Sitiavw ni la Comisión Revisora están obligados a consultar a la base si se acepta o no la oferta de aumento salarial que haga la empresa. Para eso está la Comisión Revisora -integrada por más de 60 personas- que evalúa cada propuesta, y que puede reducir o no su demanda del 11 por ciento de aumento salarial.
En esta semana sindicato y empresa harán propuestas y contrapropuestas, con tal de evitar que estalle la huelga el próximo domingo 18 de agosto a las 11 horas.
Mientras, este martes todos a festejar, directivos de VW, obreros, empresarios y autoridades gubernamentales todos a festejar los 10 millones de autos fabricados durante 49 años en la planta de Cuautlancingo, Puebla.