Varios son los temas a comentar luego de una Semana Santa no tan santa en el ámbito político local y nacional.
Desde luego, en lo aldeano, destacó la serie de enroques que desde el Gobierno del Estado se hizo en varias áreas del Gabinete. Ya ni qué decir que todo el movimiento se consumó justamente en la semana de vacaciones y eso provocó una reacción prácticamente nula entre la prensa y opinión pública en general.
Lo que sí es un hecho es que el proyecto de Mario Marín para echar a pelear a sus gallos con miras a la sucesión de 2010 ha comenzado.
El mensaje de enviar a Javier López Zavala a Sedesol fortalece las posibilidades del político chiapaneco, eso que ni qué, además de reconocer que es uno de los aspirantes serios con permiso del Gober. Pero de eso a que sea explícitamente el mentado “Delfín”, yo no lo aseguraría tanto. Claro, sus aliados en la prensa y columnas no se cansan de repetir que así es, pero…
Yo creo que el Gobernador sube a la mesa del juego a Zavala, pero no descarta a Mario Montero, también de todos sus afectos. Los echa al ruedo, pues, para ver quién destaca, pero también para ver quién aguanta. ¿Quién se moverá más y mejor? ¿Zavala con toda la lana de Sedesol o Montero con toda la operatividad de Gobernación?
Pero la nominación tricolor también deberá pasar por el tamiz del famoso “posicionamiento” en las encuestas y los padrinazgos nacionales y de los líderes grupales locales. El propio Marín llegó así a obtener la candidatura hace unos años, cuando nadie le daba grandes posibilidades, pues los candidatos de Melquíades Morales habían sido, primero, Rafael Moreno Valle Rosas y al final, Germán Sierra Sánchez.
Se sabe también que Beatriz Paredes, Manlio Fabio Beltrones y hasta Enrique Peña Nieto ya andan jugando con distintos proyectos que apoyar, para que a su vez los apoyen a ellos en sus sueños presidenciales.
Por lo anterior, efectivamente, o Zavala o Montero son los gallos de Marín. Y en una de esas, hasta el propio Alejandro Armenta, ahora que tome las riendas del PRI. Pero también vendrán más aspirantes. Y el que tenga más aguante y maneje mejor su estrategia, será el que llegue.
Así pues, Enrique Dóger también ha comenzado ya a trabajar con todo para buscar la nominación. Tiene recursos y es el que mejor va en las encuestas, lo saben los marinistas. Pero Víctor Hugo Islas y Chucho Morales se han tomado en serio sus aspiraciones y ahí andan de pueblo en pueblo. Y Jorge Stefan Chidiac hará lo propio, aunque creo que él pedirá mano para la Alcaldía capitalina.
En fin. De que el Góber tiene proyecto A, B y hasta C, es un hecho. Pero a veces los proyectos transexenales suelen no funcionar. Acuérdense.
Ahora bien, los priístas andan entusiasmados porque en las encuestas, efectivamente y como aquí mismo lo acabo de publicar, el tricolor sigue superando al PAN en la capital y en el resto del Estado.
Sí. Pero falta mucho para las elecciones y esa tendencia puede cambiar en un solo mes. Ya lo hemos visto y platicado aquí también.
Y si en el PAN se pusieran las pilas y lanzaran a un (a) candidato (a) ganador (a), quién sabe cómo le iría a un López Zavala o a un Montero. La gente –lo hemos dicho aquí hasta la saciedad- ya no la entusiasma tanto un partido (ni PRI, ni PAN, ni PRD) como sí un buen candidato.
Y si en este poco más de un año que falta para la nominación, el marinismo no logra convencer a la opinión pública, se desprestigia o lanza a un mal candidato, podría muy bien ser el momento del PAN, con un buen candidato (a), desde luego, seguido de una buena campaña.
Pero bueno, ya iremos viendo. Y aquí podrá usted ver las preferencias electorales, se lo aseguro.
POBRE PRD.
Así he titulado ya otras veces, esta dizque columna de análisis. Pero es que ahora sí se la ganaron a pulso los perredistas.
Ha pasado ya más de una semana de su proceso interno para elegir Presidente nacional y dirigencias estatales y es la hora que nadie sabe quién carambas ganó.
Que hubo toda una serie de cochinadas. Que hubo acarreados. Padrones falsos. Compra de votos. Robos de urnas. Falsificación de cifras. Vamos, hasta su propio PREP sufrió de “caída de sistema”.
Ahora las dos facciones que se disputan el triunfo ya quieren correr al que organizó el proceso, el ex priísta tabasqueño (¿quién en el PRD no es ex priísta???) Arturo Núñez y tanto Alejandro Encinas (de las tribus pejistas) como Jesús Ortega (de las tribus novoizquierdosas) exigen el “voto por voto y casilla por casilla”. Pero a la vez, ninguno de los dos quiere que sea el otro el que comience la revisión.
Total: Un verdadero marranero.
El epílogo será el que todo mundo esperaba ya.
Si se llegara a declarar que ganó Jesús Ortega, el Peje y sus huestes se largarán del PRD y se refugiarán en otro partido, con el apoyo de Dante Delgado. El famoso “Evolución”, más lo que quede de Convergencia y seguramente los oportunistas del PT.
Y si llegaran a declarar a Encinas como el nuevo Presidente del CEN perredista, los “Chuchos” organizarán una megaprotesta y también son capaces de separarse del PRD.
O sea que de una u otra forma, el cisma perredista está ya en la agenda nacional. Ya nomás falta saber cuándo ocurrirá.
Mientras tanto, el españolín Mouriño sigue escondiéndose de los medios y PRI y PAN fraguan ya la reforma energética para privatizar (de una u otra forma) PEMEX.
Y mientras todos nosotros de Semana Santa.
Felices Pascuas.
