Hubo invitados y ponentes de lujo, incluidos los candidatos presidenciales de las tres principales fuerzas políticas en el país (el pobre de Gabriel Quadri no aceptó asistir que porque lo habían invitado en forma “apresurada”… pero nadie notó su ausencia; además es un tarugo –por decir lo menos- pues desaprovechó un foro inmejorable para darse a conocer… aunque en realidad creo que declinó ir por temor a que se le hicieran preguntas incómodas sobre su dueña Elba Esther Gordillo).
El Consejero Presidente del IFE fue duramente cuestionado por Jorge Alcocer (Revista Voz y Voto) por tener una regulación excesiva sobre encuestas pre-electorales… que nadie respeta, además del absurdo período de silencio de la “intercampaña”. El Consejero Lorenzo Córdova –brillante- incluso aceptó que si toda encuesta que se dé a conocer debe registrarse ante el IFE… entonces el Presidente Felipe Calderón lo debió hacer con la que comentó –de MERCAEI- con Consejeros de Banamex. El Director de Mercaei –también miembro de AMAI- luego dijo que ya la registró, aunque no queda claro si Calderón violó la ley (cosa que le tendría sin cuidado como en otras ocasiones).
Sobre esa encuesta, la opinión generalizada es que está fuera de todo “rango” con respecto a todas las que se han publicado hasta hoy (Mitofsky, Parametría, Reforma, El Universal, etc.) y deja muchas dudas sobre su autenticidad.
Sobre los candidatos presidenciales, que tuve a unos metros de mí, puedo opinar lo siguiente:
Josefina Vázquez Mota ha mejorado mucho su manejo de auditorios. Ya la veo más segura y con buenas tablas. No dijo nada interesante sobre las encuestas –tema que no domina- pero pasó la prueba. Aún tiene varias muletillas cuando habla (dijo “evidentemente” una y otra vez) pero se nota que sus asesores la han venido preparando.
Enrique Peña Nieto tampoco hizo mal papel. Habló seguro y se notó que le prepararon mejor el tema que a la panista. Buen manejo de auditorio (de puro analista muy preparado), aunque también tiene muletillas aún (“sin duda” lo repite a cada rato). Peña no es el menso que se cree en las redes sociales. Trae rollo más o menos estructurado y se nota trabajo de asesores también.
Andrés Manuel López Obrador es quien no hizo tan buen papel. Es inteligente, eso nadie lo duda, pero sigue en esa costumbre de hablar con pausas demasiado largas que aburren al más atento. Además, no quiso hablar de encuestas y prefirió recetarnos con sus propuestas de gobierno –rayando en la violación a la veda electoral-. La verdad es que nos durmió a varios. Aún con todo, es un personaje y jaló los reflectores de los reporteros cuando afuera lo entrevistaron.
Entonces, en este primer escarceo de los presidenciales, nada para nadie, aunque la panista y el priísta sí manejaron mejor el evento que el perredista.
Por lo anterior es que los mejores encuestadores del país coinciden en que la contienda no ha comenzado y que será muy competida. Las encuestas de hoy no son predicciones de lo que pasará en julio, pues falta la campaña y todo lo que eso significa.
Periodistas (Loret de Mola, Roberto Rock, Carlos Puig) y analistas, también coinciden en que si bien el trabajo de los encuestadores enriquece a la democracia y será fundamental en esta cerrada elección próxima, también es cierto que las mediciones demoscópicas están siendo muy cuestionadas últimamente.
Los estudiosos de la opinión pública responden que efectivamente, el trabajo de campo se ha dificultado en los últimos años, que ha crecido la tasa de rechazo y no respuesta y que mucha gente ya aprendió a mentirnos cuando los cuestionamos sobre su preferencia electoral. Pero que aún así, una encuesta bien hecha, con un buen cuestionario y un buen diseño muestral… es difícil que se equivoque. A menos que intervengan otros factores (como los que yo mismo he descrito mucho en esta columna: compra de votantes el día de la elección, voto golondrino, etc.)
Finalmente, también se habló sobre la influencia de las redes sociales y su peso real para esta elección 2012. Los expertos (Gabriela Warkentin, Daniel Moreno, Pepe Merino, Rosana Fuentes Berain) dicen que serán muy importantes. Y no tanto porque haya millones de personas en Facebook o Twitter (muchos de ellos no votan), sino porque lo que se está diciendo hoy en las redes sociales, “salta” de inmediato a los medios masivos y es ahí donde ya influyen en forma determinante. El caso de Peña Nieto y sus errores literarios es el mejor ejemplo de ello.
Las redes sociales incluso han cambiado la forma de comunicarnos y hacer periodismo y quien no lo haya entendido, simplemente dejará de tener influencia o… desaparecerá. Sostienen los expertos que ninguno de los candidatos ha entendido bien esto y solo usan las redes para emitir especies de boletines de prensa o… fingir que están hablando ellos. Pero no comprenden que las redes son para interactuar con los seguidores, no para informarles dónde andan o si fueron al súper…
En fin. Lo que sí me queda claro después de este “Laboratorio Político” de la AMAI, es que el trabajo de los encuestadores es cada día más valorado y también más cuestionado. Y ambas cosas están perfectas.
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