Manuel Bartlett Díaz no regresó a la escena política de Puebla para pelearse con el primer gobernador emanado de una coalición, Rafael Moreno Valle; no, el ex mandatario está aquí para conseguir el voto de priistas que le permita regresar a la Cámara de Senadores para detener la destrucción del país que comenzó con los gobiernos panistas y también para desterrar la hegemonía del “pequeño grupo” que domina al PRI.
En entrevista con Al Portador matutino, que conduce Alejandro Mondragón, el ex mandatario se mostró relajado y hasta disfrutó de una buena taza de café colombiano Juan Valdes que el anfitrión le convidó.
A pregunta expresa del conductor el precandidato por el Partido del Trabajo aclaró de manera contundente que no le interesa pelearse con Moreno Valle.
-¿Qué rol tendrá en Puebla Manuel Bartlett? Porque hay quien dice que viene a pelearse con el Gobernador
-Claro que no, yo vengo con una visión nacional a buscar el apoyo de los poblanos para estar en el Senado, necesito estar ahí para frenar el desenfreno del Ejecutivo que ha hundido al país.
Ahora estoy en primer lugar de la lista plurinominal del Partido del Trabajo, yo podía hacer una campaña nacional pero llegué a la conclusión de que era necesario venir a Puebla por el voto de priistas. No me preocupo por el Gobernador, yo ya estuve en esa posición, pero eso sí, lo único que espero es que no meta las manos en la eleccón, como tampoco voy a permitir que las meta la federación a través del programa Oportunidades.
No me interesa pelearme con el Gobernador, sino frenar la destrucción del país y conseguir votos para Andrés Manuel López Obrador.
Su otro objetivo se centra en “el grupito” que lo vetó desde que salió del Senado y que se ha apoderado del PRI llevándolo a la derecha.
En la charla narró que desde 2006 el grupo afin a López Obrador lo invitó a participar pero consideró que no era el momento de migrar pues debía quedarse dentro del PRI para detener el impulso neoliberal de privatizar la electricidad y otras cosas.
-¿Pero que no la república amorosa está más cerca de Carlos Slim que de Carlos Marx?
-No, y yo he dicho que en este momento el único líder popular, social, es López Obrador, independientemente de otros candidatos.
-¿Si habla de congruencia cómo aplicar ese principio si sigue en el PRI pero ya no respalda a ese partido y acepta una candidatura externa de la izquierda?
Bueno el problema es que el PRI, como agrupación nacional, no tiene nada que ver con la cúpula a la que me refiero, hay una hegemonía de unos cuantos asociados con el PAN, así era Enrique Jackson que votaba con Diego Fernández de Cevallos y había una minoría en el Senado que estabamos en contra.
-Bueno fauna hay en el PRI y también en la izquierda.
-Ah claro, vividores los hay en todos lados, en todos los partidos pero entonces yo digo que no les voy a dar el gusto de salirme, los voy a sacar a ellos. En Puebla tengo el apoyo de las izquierdas, con quien tengo una relación muy estrecha desde 2006; la gente pensante del PRI no está con Manlio Fabio Beltrones, Emilio Gamboa ni con Beatriz Paredes, está con nosotros.
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