Karina Fernández |
El abogado de la Udlap, Carlos Robledo sostuvo que hasta que no haya una entrega formal de las instalaciones, estudiantes ni docentes ingresarán al campus y convocó a los mismos a no incurrir en actos de violencia.
Explicó que la orden de la jueza de control que autorizó la reapertura de la universidad carece de sustento legal, pues debe ser el Juzgado 60 de Distrito que ahora está encargado del caso, quien haga entrega formal de las instalaciones al patronato que preside Margarita Jenkins de Landa.
Además tendrá que hacerse en presencia de un funcionario judicial que levante un acta de las condiciones en que se encuentra el campus tras siete meses cerrado.
“Claro que vamos a retomar las instalaciones pero lo haremos por la vía legal, cuando el Juez 60 de lo Civil nos haga entrega formal de las instalaciones con la presencia de un funcionario judicial que levante un acta y de género de lo que quedó y no quedó adentro después de siete meses”, dijo.
En videoconferencia, explicó que la orden que emana del Poder Judicial del Estado carece de validez y sustancia legal porque no se está cumpliendo con entregar el campus al patronato correspondiente.
Lo calificó como un juego perverso que pretende confundir a la comunidad universitaria, “lo que hicieron ayer es un bonito show pero no pasa de eso porque no tiene ninguna sustancia legal y no están cumpliendo con la debida entrega”.
El abogado se mantuvo al margen de los asuntos administrativos de la universidad, desconociendo las afectaciones económicas que este asunto ha generado, así como la baja de la matrícula estudiantil.
Dijo saber sobre la posible firma de convenios de la universidad con otras instituciones privadas como el Tecnológico de Monterrey para que las instalaciones puedan ser usadas por los estudiantes, sin mayores detalles.