Por Karina Fernández
Tras el segundo día consecutivo con alrededor de 150 nuevos casos positivos a COVID-19, el gobernador Miguel Barbosa Huerta adelantó que este puede ser el comienzo de la estabilidad y control de la pandemia en la entidad.
Por ello, no descartó que si esta ruta se mantiene pueda haber reajustes para acelerar el retorno a las actividades sociales y económicas en Puebla.
En videoconferencia, el mandatario estatal explicó que mantener la tendencia por 10 días podría significar que la siguiente semana los casos diarios positivos a la enfermedad no rebasen las 100 personas.
“Hablé de una meseta de dos días, vamos a ver si se sostiene toda la semana. Si se sostiene, haremos una reflexión el fin de semana sobre ello y podremos estar tomando decisiones al respecto, todo en función de cómo vaya evolucionando la crisis de salud que hay en cada región del estado”, dijo.
Puntualizó que por el momento permanecen las medidas preventivas a contagio de COVID como el auto confinamiento, la sana distancia, uso obligatorio de cubre bocas; también los que involucran la operación de restaurantes pues sigue vigente el decreto que les permite funcionar sólo con servicio a domicilio y para llevar.
“Los decretos que emití sobre funcionamiento de establecimientos están vigentes. No he emitido decretos que cancele los anteriores (…) Protección Civil seguramente hará despliegues para verificar su funcionamiento, apertura y reinicio de actividades de muchos negocio como expendedores de alimentos para que puedan analizar la posibilidad de empezar a funcionar cuando tengan medidas y protocolos para la prevención de riesgos”.
Recordó que su gobierno es el que más decretos ha emitido para la prevención de contagios, con políticas públicas para el impulso de la economía y fortalecimiento del sistema de salud que ha permitido evitar el colapso.
Falta de recursos frena nuevos reclusorios
En otro tema, el mandatario estatal defendió la necesidad de construir por lo menos tres reclusorios más en Puebla para evitar la sobrepoblación de los penales en existencia, sin embargo admitió que su gobierno no cuenta con el financiamiento para materializarlos.
Explicó que la federación tampoco está inyectando recursos públicos para penales, ya que actualmente el tema COVID es prioritario.
Dijo que un penal en Tehuacán sí puede ser posible ya que puede ser autofinanciable, sin embargo el de Cholula requeriría de recursos públicos propios del estado que actualmente también están focalizados en el combate a la pandemia.
Otra propuesta es dividir el penal de San Miguel aunque se advierte un proyecto complicado. Comentó que se buscará el financiamiento para que estos proyectos se concreten a manera de combatir el hacinamiento.
