Por Karina Fernández
El gobernador Miguel Barbosa Huerta anunció la emisión de un decreto para evitar que empresas de la industria automotriz en la entidad, particularmente las armadoras de Volkswagen y Audi, retomen sus actividades el 1 de junio.
El mandatario estatal había decidido dejar en manos de la federación la decisión de que estas empresas reanudaran su producción; pero luego de que Puebla registró su segundo día consecutivo con más de 120 contagios por COVID-19 adelantó que en las próximas horas fijará su postura mediante un decreto.
Sostuvo que la entidad no está en condiciones de permitir que las armadoras automotrices aquí instaladas reanuden su producción aun reconociendo la importancia de las mismas para la economía local y nacional, por lo cual se advierte que el decreto se opondrá a la determinación del gobierno federal.
“De Volkswagen y Audi vamos a ver si cuando emita mi decreto lo respetan, espero que sí, vamos a ver; ese decreto puede ser emitido hoy mismo o a más tardar mañana para que de manera directa sepan la posición del gobierno”.
Qué más claridad quieren después de lo que he dicho, redicho, contradicho y repetido, ‘no hay mejor sordo que el que no quiere oír’. Yo lo he repetido de manera clara pero ellos quieren decreto, habrá decreto”, recalcó.
El mandatario poblano insistió que el aumento en contagios son “las primeras consecuencias” de desbordamiento social que provocó el gobierno federal al anunciar el plan de regreso a la nueva normalidad que comenzó este lunes.
Reveló que también esta semana, sectores económicos como el de comercio comenzaron a ejercer más presión para solicitar a su gobierno la reapertura de sus negocios; no obstante dijo que no cederá a exigencias que pongan en riesgo la salud de los poblanos.
“Vamos dos días con más de 120 contagios, subió un 50% de un solo jalón porque la gente se desbordó. No juguemos con la vida ni con la salud”, sentenció.
Agregó que Puebla cuenta con un sistema de salud fortalecido pero al ritmo de contagios que se han reportado esta semana, ningún gobierno tendría las capacidades para brindar atención hospitalaria para enfermos que así lo requieran.
