Por Rocío García Olmedo
Sin duda avanzar en medidas para cumplir la garantía y protección de los derechos humanos, ha sido muy importante en los últimos años en nuestro país.
El Principio de Progresividad, establece la obligación del Estado de generar en cada momento una mayor y mejor protección y garantía de los derechos humanos, de tal forma que estén siempre en constante evolución y bajo ninguna justificación en retroceso.
Este Principio está contenido en la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos (artículo 1º CPEUM), en el tercer párrafo “(…) Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley.”
Por eso importante visibilizar que el Presidente Andrés Manuel López Obrador, ha dado un paso muy importante para incluir medidas progresivas en la Reforma Educativa aprobada apenas el pasado quince mayo enviada en la Cámara de Diputados y ya en vigor porque ha sido publicada también en el Diario Oficial de la Federación (DOF 16/05/2019).
Como principios rectores en planes y programas de estudio conceptos ha incluido los conceptos: perspectiva de género y educación sexual y reproductiva. El párrafo décimo segundo del artículo 3º Constitucional -hoy en vigor- señala:
“Los planes y programas de estudio tendrán perspectiva de género y una orientación integral, por lo que se incluirá el conocimiento de las ciencias y humanidades: la enseñanza de las matemáticas, la lecto-escritura, la literacidad, la historia, la geografía, el civismo, la filosofía, la tecnología, la innovación, las lenguas indígenas de nuestro país, las lenguas extranjeras, la educación física, el deporte, las artes, en especial la música, la promoción de estilos de vida saludables, la educación sexual y reproductiva y el cuidado al medio ambiente, entre otras.”
Sin duda un paso importantísimo si consideramos que la educación sexual como derecho humano permitirá obtener las herramientas para la toma de decisiones encaminadas a la salud sexual y reproductiva. De altísima importancia para Puebla, porque representará que al ser incluidos en Puebla, sean implementados programas y acciones que permitan reducir los índices de violencias en el noviazgo, en embarazos adolescentes y por supuesto se evite que las adolescentes se arriesguen a enfrentar el grave riesgo de perder la vida por realizarse abortos clandestinos, o que sean asesinadas por sus parejas presuntamente por este motivo o porque estaban embarazadas, tan sólo habrá que remitirse a las jóvenes que han sido víctimas de feminicidio -violencia extrema en su contra- varias de las cuales estaban embarazadas.
Representará también atender de manera coordinada con la Secretaria de Salud, el embarazo adolescente que es una alerta en nuestro Estado, no solo por los riesgos en salud de la madre y los recién nacidos, sino también porque limita las oportunidades de su desarrollo personal. El Sistema Nacional de Información en Salud (SINAIS), reportó que en 2015 hubo 24 mil 827 nacimientos de mujeres de 15 a 19 años residentes en el Estado de Puebla, para 2016 el dato fue de 22 mil 976 nacimientos lo que representa una reducción de mil 851 casos. [1] Cifras son alarmantes, ya que por su edad este tipo de embarazos son considerados de alto riesgo.
Más aun cuando Puebla se ubica entre los ocho estados con los registros más altos de defunciones de mujeres embarazadas en el país y la Secretaría de Salud del Estado de Puebla (SSEP) detalla que de 2011 a 2018 se registró la muerte de 25 mujeres menores de edad, fallecidas por complicaciones en el embarazo o enfermedades que contrajeron. Tan sólo de enero a mayo del 2019 -reporta el Informe de Muertes Maternas de la Dirección General de Epidemiología (DGE) de la Secretaría de Salud que en Puebla- se registraron 10 muertes de mujeres embarazadas, un caso cada 13 días.
Por ello importante resaltar la inclusión de medidas de progresividad para avanzar en la garantía y protección de dos derechos humanos en la reforma educativa ya publicada: educación y salud sexual y reproductiva. Muy bien Presidente López Obrador.
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[1] Consejo Estatal de Población, Programa 2017·2018, pág. 22, consultado el 23 de octubre de 2018 a las 18:15 horas
