Por Jesús Manuel Hernández
Entre los grupos políticos relacionados al morenovallismo y poco en el panismo circula una versión donde uno de los presuntos herederos del grupo político que creció por varias partes del país, estaría intentando hacer cabeza desde las primeras horas del accidente del 24 de diciembre.
Se le identifica como el hombre de confianza en las operaciones subterráneas, el único con la capacidad de ejecutar acciones y con un plus, la información que posee de los amarres que se dieron en el tránsito de ocho años.
Ese simple hecho lo convertiría en un hombre de poder informativo de las personas y de los hechos, una especie de “Pollo” del siglo pasado que desde hace tres semanas viene postulando a Jesús Rodríguez Almeida como el responsable del despacho y el presunto gobernador interino.
Si se toma esa decisión sería totalmente acorde a los intereses del grupo hasta ahora acéfalo y sería a partir de esa acción que el reagrupamiento se vendría dando a fin de dar la pelea en las elecciones extraordinarias.
Las primeras manifestaciones se vienen dando ya en las designaciones de candidatos a Presidente de las Juntas Auxiliares, donde la información, el dinero para la logística y la tenebra estarían unidas en los puños de un solo hombre y sus marionetas, quizá incluso algunos diputados locales con ambición inmediata, y eso haga posible que simpatizantes del morenovallismo aparezcan ahora como protegidos de MORENA.
El tema de fondo es que el personaje que quiso ser siempre como el “Pollo” asegura tener agarrado con pelos y señas al mismísimo Marko Cortés, de donde se resumiría que la dirigente nacional no opte por la postulación de una terna para el interinato.
O por lo menos, así me lo parece.
