24-11-2024 11:01:02 PM

¿Puebla en el acuerdo?

Por Jesús Manuel Hernández

 

Las cosas se ponen interesantes en Puebla. Asistimos al encuentro, al choque, de dos fuerzas políticas, donde la inteligencia no está ausente. El pueblo, por demás está decirlo, empezará tomar parte en la post contienda, en la judicialización del proceso. Nada nuevo para muchos.

El escenario recuerda las elecciones de 1982 donde Ricardo Villa Escalera enfrentó al Estado gobernado por Guillermo Jiménez Morales, quien envió a Jorge Murad a la presidencia Municipal. A los operadores se les pasó la mano, hubo robo de urnas, relleno, violencia, amenazas, la elección se manchó y el costo político para el gobernador fue muy alto.

En aquél entonces, el vicario episcopal, Humberto Vargas comentó en un programa de radio sobre el fraude electoral e hizo un llamado a Jorge Murad para que recapacitara y no se sentara en la silla de la cual no era digno. El sacerdote sufrió las consecuencias.

36 años después los poblanos volvemos a vivir las escenas, pero ahora enmarcada en más hechos de violencia, de violación al Estado de Derecho y a las normas electorales primarias. La voluntad de una sola persona, ha podido imponerse a la voluntad de cientos de miles de poblanos que no piensan como él. Y ahora, como hace 36 años, también se les pasó la mano.

Sólo que las condiciones del país son otras, las benditas redes sociales y el triunfo de López Obrador, hacen un cuadro diferente. ¿Cómo es posible que MORENA haya ganado en toda la entidad y la gubernatura haya quedado flotando? Ni los encuestadores, ni los analistas, lo entienden, sólo los voceros del morenovallismo ven la paja en el ojo ajeno.

Las condiciones del resultado electoral obligan a Barbosa a presentar las quejas en el orden estatal y de no encontrar respuesta favorable, en el orden federal, con lo cual, nuevamente serán los tribunales federales los que metan la mano en asuntos poblanos ante el compromiso, ante la cooptación de los funcionarios locales con el ex gobernador. Un asunto, sin duda delicado.

A estas alturas, cuando López Obrador actúa ya como Presidente y marca la agenda nacional, se antoja preguntar si meterá las manos por el proceso electoral en Puebla o dejará correr el rumor de que todo estaba pactado bajo la frase de “Amlo sí, Barbosa no”.

López Obrador dijo al salir del encuentro con Peña Nieto que por primera vez el Estado no había intervenido de manera facciosa en las elecciones. ¿Podría decir lo mismo en el caso de Puebla?

Habrá que seguirle la pista a los acuerdos nacionales.

 

O por lo menos, así me lo parece.

 

About The Author

Related posts