En ese mismo espacio hicimos un llamado para que alguien, alguna autoridad universitaria pusiera un alto a esta acción a todas luces irregular, ya que lesiona no solo la economía de los estudiantes sino que violenta el espíritu de gratuidad que tiene la educación superior pública en Puebla.
Pero no.
Alfonso Esparza y su panda de cómplices están más ocupados en ver cómo saquean las arcas de la universidad que en poner orden para transparentar y legitimar el proceso de admisión de nuevos estudiantes para el próximo ciclo escolar.
De nueva cuenta y a través de su perfil de Facebook, el sujeto de marras, Leo Balcazar, anunció que ante la proximidad del proceso de admisión cuenta con plazas para poder estudiar en una de las licenciaturas de la universidad, y no solo eso, sino que también dice contar con la disponibilidad de 7 plazas laborales en la propia institución.
A través de un post compartido en una cuenta pública de ventas al mayoreo y menudeo, Leo Balcazar detalla el número de lugares y el costo, así como los requisitos que necesitan los aspirantes a obtener una plaza de trabajo en la máxima casa de estudios.
De acuerdo con su post, Leo Balcazar pone a la disposición de los interesados lugares para estudiar en la facultad de medicina, con un costo de 30 mil pesos; Estomatología, Derecho y Admministración Turística, 25 mil pesos; cualquiera de las Ingenierías, Contaduría, Economía, Ciencias Políticas, Cultura Física y Arquitectura, 20 mil pesos.
También ofrece, a precios desde 15 mil pesos, plazas para estudiar Gastronomía, Psicología y Biología; además aclara que si el interesado quiere estudiar alguna carrera que no aparece en el listado, puede preguntar pues sólo enumeró las más cotizadas.
De igual forma vende plazas laborales a 20 mil pesos cada una, ofreciendo un horario de 9 a 4 de la tarde con una hora de comida, descanso los fines de semana, plaza sindical, firma de contrato colectivo de trabajo y prestaciones conforme a la ley, un ingreso mensual de entre 12 mil y 17 mil pesos mensuales, pero si el aspirante cuenta con título y cédula profesional, puede acceder a un empleo en el que gane hasta 24 mil pesos.
¿Cómo la ve?
Con total cinismo y descaro opera este tipo en las redes sociales sin que el rector Esparza y sus achichincles hagan algo al respecto, por lo que no me queda más que preguntar: ¿De cuánto será el moche para ellos, que lo dejan operar con impunidad e inmunidad?
