Por el otro el descontento en manifestaciones con rasgos de anarquistas o cualesquier grupo que se identifique con las guerrillas urbanas.
San Lázaro fue cercado cuando Peña tomó posesión, los anarquistas o enmascarados de anónimos rompieron el cerco y hubo zafarrancho.
Lo sucedido anoche en el zócalo de la Ciudad de México, el enfrentamiento con granaderos con un pequeño grupo derivado de la marcha convocada por el tema de los normalistas desaparecidos luego del informe de Murillo Karam sobre las indagaciones de su paradero, culminó con el incendio de la puerta del Palacio Nacional.
Aunque hay confusión sobre el origen del incendio, algunos piensan que el ejecutor fue protegido por los granaderos, lo que implicaría que la marcha y las agresiones estuvieron infiltradas por agentes afines a algún poder político; el hecho en sí mismo constituye un hito histórico, que muchos jamás pensamos que sucedería.
Los ánimos se calentaron desde la tarde del viernes cuando una desafortunada frase del procurador Murillo Karam “Ya me cansé” detonó el descontento nacional en redes sociales y memes. Las pancartas aparecidas en la marcha de ayer son dignas de análisis: “Murillo, tú estás cansado, nosotros hasta la madre”.
Otra: “A México, urge una revolución social, si no es hoy no es nunca, llegó la hora”.
Pareciera que al rompecabezas nacional de pronto le faltan piezas, alguien las escondió.
Los analistas internacionales insisten en que algo fuera de control está pasando en México, y todos voltean la cara al presidente Peña Nieto, que sale a explicar a los chinos por qué les quitó la licitación del tren rápido a Querétaro.
Quién está dando la cara por los desaparecidos, quién por los intereses económicos, quién por las carencias y la realidad social de un México sufriente que no puede tolerar los excesos del poder.
Peña Nieto se hace construir una residencia fastuosa de 80 millones de pesos, ¿le parece a usted lógico, razonable, republicano, tal exceso? El autoritarismo está desbordado.
¿Qué diferencia puede encontrarse entre José Luis Abarca y la orden de desaparecer a los normalistas de Ayotzinapa; el presidente municipal de San Baltazar Chichicápam, Oaxaca, Carlos Vásquez Rebollar, que ordenó disparar contra pobladores, hay 17 lesionados, o la orden de “castigo ejemplar” contra los habitantes de Chalchihuapan, con un niño muerto y sus ejecutores gozando de libertad?