Dos grupos. Pero una cosa en común. Quien llegue a ganar, sea quien sea, tendrá en su haber el estigma de la corrupción y el desprestigio.
Qué lejos quedaron los años en los que el PAN y sus liderazgos denunciaban las corruptelas del “PRI-Gobierno” y su “nefasta historia de clientelismo”. Qué lejos quedaron los años en los que el PAN renunciaba al financiamiento oficial y mejor organizaba rifas de autos (aquí en Puebla los cochecitos siempre eran exhibidos en la calle 5 de Mayo y se ofrecían boletos cotidianamente a los transeúntes). Qué lejos quedaron los valores que decía defender Manuel Gómez Morín, el bien común y la solidaridad y subsidiariedad, pilares de
Hoy cualquiera de los dos grupos se disputa el título del más cochino y tiene entre sus protagonistas a singulares ejemplos de ratas y bribones. Vaya, al PAN solo le hacía falta tener el poder federal, para hacer exactamente todo lo que criticó durante décadas del terrible y aborrecido “priato”.
Veamos.
Gustavo Madero está señalado como un buen negociador de prebendas para empresas como Oceanografía, de la que cada día se descubren más porquerías. Hoy pretende fingir demencia y asegura que viajó en el avión de dicha empresa casi “sin saberlo”, aunque es evidente que gracias a sus influencias la corrupta empresa obtuvo sendos contratos con PEMEX y para hacer obras públicas -sin ser su rubro ni especialidad- con algunos Gobiernos como el de… Puebla.
No se necesita ser genio para saber por qué el Gobernador poblano Rafael Moreno Valle apoya más que evidentemente la candidatura de Madero para repetir en el CEN blanquiazul: Todo indica que ha habido una notable amistad y apoyo de ambos para llegar a sus objetivos. Madero quiere reelegirse y el poblano quiere el control del CEN para obtener sin problemas la candidatura presidencial del PAN en 2018.
Claro, hoy en el Gobierno poblano se quieren deslindar de las andanzas de la desprestigiada Oceanografía y hasta le han retirado obras que le habían dado (¿por qué si hoy se dan cuenta de las anomalías de la empresa, le dieron las concesiones en su momento…? Cualquier cosa que digan NO les favorece), pero todo mundo se dio cuenta de la estratagema. El periodista Raymundo Riva Palacio lo expuso perfectamente en su columna del viernes pasado en El Financiero.
Bueno. Esos son los nexos de Madero con Oceanografía y gobiernos como el de Puebla (que por cierto, es simplemente la empresa consentida de los gobiernos panistas para sacar beneficios y negocios, como en su momento las tuvieron los priístas y seguramente habrá varias “peñistas”). Y obviamente seguirán saliendo más cochinaditas de la mentada empresa. Creo que todo esto es solo el comienzo. Todo un océano de marranadas, pues.
Pero Oceanografía no solo salpica de caca a Madero y su grupo. También al de su contendiente por el CEN blanquiazul. Recordemos que Ernestillo Cordero fue Secretario de Hacienda en tiempos de Felipe Calderón y que en su mandato, Oceanografía estuvo haciendo de las suyas también. Digo, es imposible que ni Vicente Fox (que ya sabemos que los hijastros de éste último al parecer tuvieron intereses en la empresa de marras) ni Felipe Calderón se hayan dado cuenta de las tropelías de la empresa.
Claro, hoy Cordero navega con la bandera de la honestidad y la denuncia de los sucios corruptos maderistas, cuando le debe estar sangrando la lengua. Porque Cordero y los Calderonistas también tienen bastante qué explicar, no solo de Oceanografía, sino de las transas con los Casinos, con la espantosa payasada de
No, por favor. Que los panistas hoy no quieran embaucar a la opinión pública con sus denuncias de corrupción de uno y otro bando: tan cochinos unos como los otros.
Sobre todo porque Ernesto Cordero lleva de compañero de fórmula al representante de
¿Quién ganará la contienda interna panista?
Hoy sí el pronóstico es reservado.
Madero cuenta con recursos de los Gobernadores que lo apoyan (destacando, ya es público en todo el país, Rafael Moreno Valle) y también con el respaldo nada despreciable del habitante de Los Pinos, a quien el chihuahuense le ha servido mucho para sacar adelante el Pacto por México. Peña Nieto no quiere en el PAN al grupo calderonista que lo ataca todos los días.
Pero Ernesto Cordero contará con la línea ordenada por el Yunque a todos sus miembros en el país, que no es nada despreciable entre la militancia panista (casi todos los Comités Directivos Estatales o Municipales del PAN en el país son encabezados por algún miembro del Yunque). Y si en Puebla el Yunque es controlado por el Gobernador a través de la maiceada y la amenaza, en los demás Estados no ocurre lo mismo.
En una de esas gana Cordero, acuérdense. Incluso me dicen algunos yunquitos que si pierde la dupla Cordero-Yunque hay planes de fundar otro partido. ¿Será?
Pero, reitero, gane quien gane, será un líder que esté marcado por la corrupción contra la que tanto luchó el PAN hace décadas.
Pobre Gómez Morín. Si reviviera, se vuelve a morir.