Los grandes empresarios protestan pese a que serán de los más beneficiados, sobre todo al quitarles el IETU y hasta el IDE, ya que el IVA en varios rubros lo pagan los consumidores no ellos.
Sin embargo, de los pequeños ni quien se acuerde, ni las Cámaras de Comercio que parece sólo están de adorno.
Es de sobra conocido que las micro y pequeñas empresas son las que abundan en el país, son las que más generan empleos y que, en ocasiones, son las que menos beneficios tienen.
En términos generales, el Régimen de Pequeños Contribuyentes (Repecos) se estableció para aquellos micro, pequeños y medianos negocios que realizan ciertas actividades económicas, y para facilitarles el pago de impuestos se fijó un tabulador de ingresos para que con base en éste cubran sus obligaciones ante el SAT.
Es cierto que con tal beneficio de Repecos muchos negocios abusan y pese a que pueden rebasar cierto monto de ingresos su pago de impuestos es menor; al tiempo que algunos tienen empleados y no les cubren un sueldo conforme a la ley, mucho menos tienen prestaciones, como seguridad social.
Aunque también hay negocios que sí declaran correctamente sus ingresos, y si tienen empleados les pagan un salario adecuado.
En la categoría de Repecos (negocios que en su mayoría son familiares) incluya a: lavanderías, misceláneas, reparadores de calzado, torterías, talleres de costura, pequeñas tiendas de regalos, recauderías, mercerías, carpinterías, entre muchos muchos más.
Al finiquitarse la categoría de Repecos todos estos negocios pasarán al régimen normal de personas morales o de personas físicas con actividad empresarial, a cubrir la tasa normal del ISR y llevar una contabilidad y administración por demás escrupulosa.
Por consiguiente es posible que varios de esos negocios opten por pasar a la informalidad o que de plano quiebren y con ello se pierdan fuentes de empleo.
Por otra parte, la reforma hacendaria pretende acabar con la informalidad al tratar de convencer a personas morales y físicas “de los beneficios de pagar impuestos”; les pretende dar un año sabático impositivo con tal que registren ante el SAT.
¿Realmente el gobierno cree que pueda incrementar la base gravable, con una oferta tan simple de un año sin pagar impuestos a los nuevos causantes, al tiempo que acaba con los Repecos?
Se ve difícil que lo logre.
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