06-05-2024 09:19:25 AM

La BUAP, despolitizada 

Por Valentín Varillas 

 

Por primera vez en muchos años, la universidad pública poblana no será tomada como botín electoral. 

Por nadie. 

De ningún partido, color o ideología. 

A pesar de que se suda fuerte la calentura de la sucesión en el estado. 

Con todo y las decenas de miles de votos potenciales que representan el control de esta comunidad. 

La rectora Lilia Cedillo ha sido muy clara, demoledoramente contundente sobre este tema. 

Y ha sabido transmitir de manera muy efectiva este mensaje a quienes ocupan posiciones de poder en el organigrama de la Benemérita. 

Las tentaciones han existido, faltaba más. 

Y desde todos los frentes. 

Quienes compiten por la candidatura de Morena al gobierno poblano han intentado infiltrar sus tentáculos al interior de la universidad, para lograr una ventaja competitiva en la carrera por la nominación. 

Se han topado con pared. 

Con un muy duro y sólido muro que blinda a la institución de intereses ajenos a los estrictamente académicos. 

Por fin.
Ya era hora. 

Lo anterior no quiere decir que la Buap se vaya a mantener ajena al debate político poblano. 

La universidad es el espacio ideal para la exposición de los proyectos y programas de todos, absolutamente todos los que pretenden gobernar el estado. 

El foro ideal para que estudiantes, académicos y trabajadores conozcan las distintas opciones que existen en el sistema de partidos y voten en consecuencia. 

Pero todo a su tiempo y desde la más absoluta neutralidad. 

Ni siquiera ha empezado formalmente el proceso electoral, de acuerdo con lo que marca la ley local en la materia. 

Los nuevos tiempos que se viven en la institución, permitirán que al interior se viva por fin, plenamente, el concepto de “universalidad”. 

La Buap de todos los poblanos. 

No sólo de una serie de camarillas que la han mantenido secuestrada para fines absolutamente personales. 

Se les acabó el trampolín político y eso, simplemente, es motivo de celebración. 

Habría que brindar, porque la fiesta de la imparcialidad y la institucionalidad dure muchas décadas más. 

A la salud de los universitarios. 

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