Por Karina Fernández
El presidente estatal del PRD, Carlos Martínez Amador consideró que las acusaciones por violencia y abuso sexual contra se han convertido en una “marca” característica de candidatos e integrantes de Morena.
Se refirió no sólo al caso más reciente del diputado federal y candidato a su elección consecutiva, Saúl Huerta, sino también a Félix Salgado Macedonio en Guerrero y David Monreal Ávila en Zacatecas, por violación y tocamientos lascivos.
“Tal parece una marca de muchos de sus candidatos pero más allá del tema político, no existe una justificación al tema de ayer y nosotros que somos padres no lo podemos dejar pasar”, dijo.
Por su parte, Néstor Camarillo, dirigente estatal del PRI planteó a los próximos diputados federales que legislen en la materia para erradicar estas prácticas en el abuso de menores, un hecho reprobable del cual también pidió sanciones ejemplares llegando hasta las últimas consecuencias.
Por el PAN, la candidata a diputada federal por el distrito 11, Carolina Beauregard exigió que se eche abajo la postulación de su contrincante de Morena por los señalamientos por abuso sexual en su contra.
Demandó justicia y cero tolerancia a quienes cometen este delito y vulneran los derechos de los menores, protegiéndose en el fuero federal ante este hecho, que más que una falta es un delito grave.
“Exigimos que se realicen las investigaciones en este caso y se llegue a las últimas consecuencias (…) No permitiremos que Saúl Huerta en su presunción de inocencia sea protegido por Morena o las instituciones, mucho menos que se refugie en el fuero”, expresó.
Consideró que el rumbo de las investigaciones permitirá saber si el partido en el poder sirve a la gente indefensa o sólo a unos cuantos que lo ostentan; y si mujeres y niños estarán a merced de pedófilos y violadores.