Karina Fernández |
El gobierno de Puebla prohibió la ejecución de obras que atenten contra la movilidad, una nueva disposición que se incorporó como parte de los lineamientos para la reapertura responsable de las actividades económicas y sociales.
Esta medida reafirma la postura del gobernador Miguel Barbosa, para evitar la realización de obras en un estado que se encuentra en color rojo en el semáforo epidemiológico del COVID-19.
“Queda prohibida toda obra de construcción que afecte la movilidad y genere la concentración innecesaria de personas. Sólo aquellas dirigidas a mitigar un riesgo inminente”, precisó Ana Lucía Hill, coordinadora de Protección Civil Estatal.
En videoconferencia, detalló que el decreto vigente del 9 al 22 de febrero amplía nuevamente el horario de servicio del transporte público, mercantil y ejecutivo que operará de 5:30 a 22 horas.
En apoyo al sector comercio y de servicios, se permite la venta de bebidas alcohólicas para restaurantes, limitada a dos bebidas por comensal y los Días Solidarios de Cierre se cambiaron para domingo y lunes.
Derivado del alto número de contagios que mantiene Puebla, en defunciones y por la presión que tienen los servicios de salud el resto de medidas contenidas en el decreto publicado el pasado 25 de enero seguirán vigentes.
Por ejemplo, la prohibición a la instalación de comercio informal y ambulantaje, y la restricción en la venta de bebidas alcohólicas de jueves a domingo, que no involucra a restaurantes.
“Se mantienen vigentes las medidas de restricción de actividades económicas, conforme al Decreto del Ejecutivo del Estado que se prorroga, salvo las reformas y adiciones contempladas”, señala el nuevo decreto.
También se exhorta a los ayuntamientos a promover acciones intersectoriales que involucren al gobierno local y sectores sociales y privados, con cambios en los entornos sociales y físicos de sus comunidades para la prevención de contagios.