Por Karina Fernández
A unos días de que Volkswagen y Audi retomen su producción, el gobernador Miguel Barbosa Huerta emitirá un nuevo decreto en el que reafirmará que en Puebla no hay condiciones para la reactivación de la industria automotriz.
Si bien la federación ya dio luz verde para que esta industria, así como del sector de la construcción y mineras retomarán sus actividades desde el pasado 1 de junio, el mandatario estatal dijo que es su obligación fijar una postura basada en la cifra de contagios y defunciones diarias en Puebla como consecuencia del COVID-19.
En este sentido, señaló que el decreto que emita este viernes irá acompañado de una serie de ajustes al plan de reactivación social, económica y laboral, pues reconoció que no habrá disposición de los empresarios para postergar más su regreso.
“Tenemos que ir administrando esta realidad, evitando la confrontación social, pero yo mañana voy a emitir un decreto. Si lo hice en el momento en que la federación hablaba de que ya había condiciones para reapertura, desde mi gobierno dije ‘no’; hoy tengo que hacerlo y esperen mañana el decreto firmado por mí en ese sentido”, adelantó.
Luego de que la Secretaría de Salud confirmó 240 nuevos casos positivos a COVID durante el miércoles, es decir un promedio de 10 casos por hora, el mandatario estatal enfatizó que la entidad mantiene un alto nivel de contagio de la enfermedad que se advierte a la alza con el incremento de la movilidad a partir del 15 de junio.
“Estamos en un nivel muy alto de la enfermedad en su contagio, por las razones que hemos hablado todos los días. Las recomendaciones son las mismas, es muy complicado lo que estamos enfrentando, pero nos preparamos para ello”, dijo.
Estimó que a finales de la próxima semana podría haber una disminución en la curva de contagios, que se mantenga en lo que resta del mes y que ronde en los 120 casos positivos diarios para que el sistema de salud no sea rebasado.
Agregó que su gobierno no ha considerado contratar una deuda para atender la contingencia por coronavirus, a pesar de las ofertas hechas por los bancos.
Recordó que su administración heredó una deuda superior a los 50 mil millones de pesos en obras suntuosas, como el Centro Integral de Servicios, el Museo Internacional Barroco y la Rueda de Observación que no generan impacto social.
