Por Karina Fernández
Puebla registra 633 defunciones por COVID-19 de un total de 4 mil 364 pruebas positivas, que se prevé incrementen en las próximas horas ya que hay 460 muestras en proceso en el Laboratorio Estatal de Salud Pública.
De acuerdo con el reporte epidemiológico presentado por el subsecretario de Vigilancia Epidemiológica, Fernando Huerta Romano, en las últimas horas se confirmaron 144 nuevos contagios y 22 fallecimientos más.
Están pendientes 460 pruebas en el laboratorio, 65% más que ayer y de las cuales se espera que por menos la mitad, es decir 230 pruebas, sean positivas las cuales se sumarían al total de casos reportados en la entidad.
El funcionario estatal detalló que hay 566 personas hospitalizadas, de las cuales 153 se encuentran en áreas de terapia intensiva conectadas a un ventilador mecánico.
Los hospitales COVID de la Secretaría de Salud concentran el mayor número de enfermos graves con 63 personas conectadas a un ventilador; sin embargo los nosocomios del IMSS atienden a la mayoría de pacientes con 215 camas ocupadas.
En los hospitales privados hay 65 personas recibiendo atención médica y de estas, 17 reciben ventilación asistida.
No hubo cambios en los 136 municipios afectados por la pandemia pero sí en los municipios activos pues dos demarcaciones fueron retiradas se está lista quedando 77 con enfermos COVID. La capital poblana sigue concentrando el mayor número de casos.
De las defunciones, Huerta Romano negó que entre los 633 decesos haya registros de menores de 8 años como se informa en la plataforma nacional.
Explicó que estos registros se debe sí a poblanos, originarios del estado, pero que radicando en otros estados adquirieron la enfermedad. De ahí la diferencia entre los reportes oficiales.
No obstante reconoció que en Puebla sí se han reportado al menos dos muertes de mujeres embarazadas, víctima de coronavirus, pero que fueron atendidas en hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).