Por Karina Fernández
A pesar del recorte de recursos federales para Proyectos de Inversión en Puebla, el gobierno del estado proyecta el inicio de la construcción de hospitales regionales, la Universidad de la Salud y de nuevos penales con el apoyo de la iniciativa privada.
El gobernador Miguel Barbosa explicó que el recorte en el rubro en cuestión no impacta al presupuesto estatal, pues la ampliación dela clínica de La Margarita o los trabajaos del nuevo Hospital de San Alejandro correspondían al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Dejó en claro que con o sin recursos públicos a partir de enero pondrá en marcha estos proyectos que, a diferencia de los centros de salud que ejecutó el morenovallismo, los nuevos contarán con equipamiento y personal para atender a los poblanos.
“Qué problema tenemos en este momento, que ni las unidades médicas, ni los centros de salud ni los hospitales están funcionando como deben de funcionar. Es un servicio deshumanizado, no cercano a la gente”.
Yo quiero un servicio cercano y la única forma es la supervisión territorial del sistema de salud, tengo ya el compromiso de construir varios hospitales independientemente de que nos baje la federación presupuesto”, puntualizó.
Para esta supervisión territorial, Barbosa Huerta explicó que se hará un rediseño de la Secretaría de Salud para que a través de dos jurisdicciones se revise el funcionamiento del sistema de salud en todo el territorio poblano.
De la construcción de los nuevos penales, detalló que se realizarán bajo el esquema de APP (asociación Público Privada). Uno de estos servirá para reubicar a más de la mitad de personas que se encuentran en el penal de San Miguel.
“Vamos a dividir a San Miguel porque está fuera de control. Son más de 4 mil personas, vamos a empezar en Puebla con un reclusorio de 2 mil 400 para enero, haya o no dinero público pues se aceptará financiamiento privado”, reveló.
Otros penales se ubicarán en las regiones de Huauchinango, Tehuacán y Teziutlán que de manera conjunta podrán albergar a más de cuatro mil reos, pues admitió que la cifra de detenciones diarias está creciendo de manera acelerada.