Por Karina Fernández
Tras tener una primera reunión con directivos de Agua de Puebla, el gobernador electo, Miguel Barbosa Huerta sentenció que el agua es un derecho y no un negocio, por lo cual emplazó a la empresa a cumplir en el corto plazo con su plan de inversión.
En entrevista, dejó en claro que su gobierno no le “temerá” a un litigio para rescindir el contrato firmado en 2013 pues arguyó que hay condiciones para echarlo abajo si se demuestra que la empresa ha incumplido con lo estipulado.
No obstante, el abanderado de la coalición “Juntos Haremos Historia” adelantó que se harán estudios y valoraciones jurídicas y económicas de las implicaciones de revocar la concesión que fue entregada para un periodo de 30 años.
Dejó en claro el tema del agua no será una bandera política en su gobierno pues debe actuarse con responsabilidad ya que se trata de un derecho de los poblanos.
“Tienen que cumplir con su plan de inversión, no en el plazo prorrogado de 5 a 10 años, son condiciones leoninas para el estado”.
Nosotros vemos el agua como un derecho no como un negocio y también la empresa debe de verlo como un derecho; tenemos que coincidir y si coincidimos en ese concepto las cosas caminarán bien”, abundó el próximo mandatario.
Tras la tragedia ocurrida en Santo Tomás Chautla, Barbosa Huerta advirtió que en su gobierno se coadyuvará con los 217 ayuntamientos para que cuenten con su Atlas de Riesgo; incluso adelantó que el gobierno podría financiar su elaboración y publicación.
“El asunto para ellos es que se les cobra por tenerlo, vamos a hacer que cada municipio lo tenga sin costo para ellos y para poder encontrar soluciones de prevención para evitar tragedias que son producto de corrupción, de asentamientos irregulares y de la pobreza”.
Comentó que en la construcción del Presupuesto de Egresos 2020 se ampliarán los recursos públicos para el fortalecimiento de la seguridad pública, para la procuración y administración de justicia, por ejemplo, para la ampliación de Ministerios Públicos.
