Por Jesús Manuel Hernández
La denuncia del senador Luis Miguel Barbosa sobre la compra de afiliaciones de burócratas al PRD poblano, no dista mucho de las expresiones conocidas en el pasado sobre un asunto similar de lo que ha venido sucediendo con el Partido Acción Nacional.
Los panistas doctrinarios fueron superados en militancia gracias a la compra de adherentes y posteriores militantes en el padrón, un asunto que fue denunciado en su tiempo y que aún no acaba por resolverse en el orden nacional, pues la intervención del morenovallismo se hizo en todo el país, con miras al 2018.
Fue el primer paso para subir a Ricardo Anaya a la presidencia del partido a cambio de que no compitiera en la sucesión, asunto que al no demostrarse le ha venido a descomponer el escenario a Rafael.
Ahora es el senador Barbosa, con amplias posibilidades de encabezar un grupo en la sucesión, quien denuncia hechos similares. Dijo que hay al menos 35 mil burócratas enlistados para engrosar el padrón del PRD poblano y con ello hacerse del control “tal cual lo hizo con el PAN”, según palabras del propio senador.
El encargado de la operación es el diputado Luis Maldonado, artífice del morenovallismo, quien pretende con ello aumentar un 36 por ciento el padrón de militantes y montarse él mismo en el control del partido.
La postura de Barbosa viene a reforzar el criterio que al parecer se ha uniformado nacionalmente en los partidos que antes hicieron la alianza Compromiso por Puebla.
Puede que estemos asistiendo al desmoronamiento del castillo.
O por lo menos así me lo parece.
