16-05-2024 08:56:13 PM

Iglesia evade tema de operativo en San Antonio

Por Shanik David

Pese a que la detención de Xihuel Sarabia Reyna, dirigente general de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, se llevó a cabo al interior de la iglesia de San Antonio, hay un cierto grado de resistencia de parte de las autoridades eclesiásticas para hablar al respecto, lo cual se suma a contradicciones entre las versiones de los asistentes y el personal del recinto religioso.

Si bien los hechos se dieron a las 13:30 horas del miércoles, para el mediodía del jueves la Arquidiócesis de Puebla dijo no tener información al respecto, y que por lo tanto no se tenía una postura sobre esta situación.

El padre Paulo Carvajal, encargado de Comunicación de la Arquidiócesis, refirió que no se tenía información sobre el caso y que no se sabía de qué manera había actuado el titular de la iglesia ante los hechos o de qué manera se habían ejecutado éstos.

Esto a pesar de que se le cuestionó de manera directa sobre la versión que dieron Maria de la Luz Gálvez y Sergio Caballero, esposa y compadre de Xihuel Sarabia, respectivamente, quienes momentos antes habían descrito que el padre Alejandro, quien había oficiado la misa donde se dieron los hechos había intercedido por el detenido.

María de la Luz comentó que el sacerdote se había puesto entre los policías y Xihuel, a pesar de que estos le apuntaron con sus armas, y les dijo que estaban cometiendo un delito, toda vez que las iglesias son propiedades federales y no podían arrestar a alguien al interior de las mismas.

La Arquidiócesis dijo desconocer esta situación, por lo que se acudió de manera personal a la iglesia para dialogar con el párroco.

Al llegar al sitio se informó que el padre no se encontraba en el lugar, pero una de las colaboradoras de él, quien estuvo en la misa, dio una versión diferente de los hechos.

La ayudante eclesiástica, quien no dio su nombre, comentó que la misa ya había terminado y que tanto ella como el padre ya habían salido de la iglesia cuando se dio la detención.

Desde una bodega conjunta a la iglesia, donde dijo se encontraba lavando unos vasos después de la ceremonia religiosa, describió que escuchó gritos que venían desde el templo, pero que pensó que eran los niños que estaban jugando.

“No vi nada, pero sé que la misa ya había acabado, y el padre ya no estaba ahí” puntualizó de manera enfática.

Para dar más información contactó a la coordinadora de la congregación, pero ésta evitó dar un posicionamiento sobre los hechos pues dijo que todo lo relacionado con este caso debería verse de manera directa con la Arquidiócesis.

About The Author

Related posts