Por: Rodolfo Rivera Pacheco
Las últimas semanas he escuchado todo tipo de versiones en Puebla, DF, Veracruz y otros Estados, provenientes de políticos de alto nivel que tienen interlocución con quienes definen los rumbos de los partidos políticos a nivel nacional – específicamente del PRI- sobre la ya muy próxima elección en 2016 de “mini Gobernador” en nuestro Estado.
Es natural. Al no haber una definición clara sobre quién será el candidato del tricolor a tal cargo, se desatan todo tipo de especulaciones.
Al contrario a lo que sucede en el PAN-Morenovallismo, donde si no pasa algo extraordinario –que por supuesto puede ocurrir- el abanderado en 2016 es el aún Alcalde capitalino Antonio “Tony” Gali Fayad, quien ya hasta anunció fecha de renuncia.
Veamos algunas de las especulaciones. Todas aseguran ser la única y verdadera.
1.- La vertiente de la “Negociación”.
Aquí caben varias versiones, favorables de uno y otro lado.
La primera es que el Gobernador Rafael Moreno Valle ha logrado trabar un pacto que le conviene y que consiste en que ha prometido al Presidente Peña Nieto que lo ayudará en su lucha contra Andrés Manuel López Obrador en 2018 a cambio de que le respeten “su” Estado y “su” candidato gane la elección en 2016 para que pueda tener una transición perfecta cuando termine su gestión, se le aprueben sus cuentas públicas y no haya persecución en su contra por parte de nadie.
Si esto ocurriera, en el PRI lanzarían a un candidato “cómodo” de la chiquillada (ni Blanca ni Dóger) y la campaña sería una cuestión de trámite solo para que Gali Fayad resultara ganador de la elección. Desde luego también a cambio de que en 2018 el PRI ganara contundentemente la Gubernatura para apoyar con votos a quien fuera candidato del PRI a la Presidencia, seguro de vida para que Peña Nieto no pise la cárcel con un Peje Presidente.
Claro, en esta versión caben también dos posibilidades: Que el apoyo de Moreno Valle al Presidente sería, o no lanzarse en 2018 para la Presidencia (hay quien me asegura que ya lo está pensando seriamente… y es una fuente de súper nivel) y promover a un candidato “cómodo” por parte del PAN (¿Madero? ¿Anaya?); o bien, lanzarse a la Presidencia pero ser un aliado soterrado de quien sea el candidato del PRI, para ayudarlo a ganarle a López Obrador (posibilidad demasiado absurda, que nuestro Gobernador quiera perder esa elección, a sabiendas de que ya no habría otra oportunidad jamás… ¿o sí?).
La segunda versión de un pacto es el favorable al PRI. Que Moreno Valle acepte que su candidato Gali va a perder la elección, a cambio de que el ganador (a) del PRI lo respete y no lo persiga y desde luego respete la decisión del Congreso del Estado de aprobar todas sus cuentas públicas. El compromiso del Presidente es que no lo bloquearía en sus aspiraciones presidenciales y hasta podría ser su candidato bajo el agua para ganarle a Andrés Manuel López Obrador. Peña Nieto lanzaría un candidato “cómodo” pero su verdadero gallo sería Moreno Valle. Versión muy difícil de cumplirse y hasta inverosímil, aunque en la práctica, en el Gobierno federal continúan sin tocar ni con el pétalo de una rosa al Gobernador poblano. Incluso uno de los presidenciables priístas, “Pepe” Meade, viene hace un par de días y abraza y toma de la mano y alaba a Moreno Valle. Eso NO es estar distanciado, ni mucho menos que el Gobierno Federal haya decidido perseguir al poblano.
En esta última vertiente es donde entronca lo que me siguen contando muchos bien enterados: Tony Gali está muy incómodo con la candidatura a la “mini Gubernatura”. Que él quería la “grande”. Que él sabe que en las encuestas viene a la baja. Que ya no aguanta los regaños y desplantes del Gobernador, quien lo trata y regaña como a su empleado. Que mejor prefiere terminar su gestión de Alcalde. Que un día de estos se le rebela… y un largo etcétera de especulaciones reales o falsas.
¿Cambiaría de montura a mitad del río el Gobernador y no lanzaría a Gali? ¿O bien, mejor lo lanza, pierde la elección, se deshace de él y pone a un empleado más cómodo para garantizar la sucesión? Especulaciones a todo vapor.
2.- La vertiente del conflicto.
Aquí entran las versiones que tienen como elemento fundamental el enfrentamiento y el romper cualquier pacto o alianza que pueda haber. Aunque también caben varias posibilidades.
La primera es el conflicto real y a secas. En el PRI lanzan o al (a) mejor posicionado (a) en las encuestas o a quien garantice una campaña de contraste y críticas puntuales y tenaces al Gobernador Moreno Valle y su candidato Gali Fayad. Tanto el Gobernador como el Presidente le meten mucho dinero a sus abanderados. Campaña de ataques y denuncias. El PRI de Manlio Fabio Beltrones le declara la guerra a Moreno Valle, aún cuando éste tenga amigos en el gobierno federal.
Gana el que haga mejor campaña y reciba los mejores apoyos de quien está detrás, Gobierno Estatal o Gobierno Federal. Escenario de pronóstico reservado. Cualquiera puede ganar.
El segundo escenario de conflicto es que el Gobierno Federal sea quien finalmente se decida a acabar de una buena vez con Moreno Valle y sus aspiraciones presidenciales, a la par de recuperar Puebla y curar a todos los heridos y lastimados del PRI y de todos lados que ha dejado la gestión de éste.
Aquí habría muy pronto denuncias puntuales contra los excesos de algunos colaboradores de Moreno Valle (de quienes ya se buscan expedientes e historial… totalmente real) y se exhibiría la enorme deuda disfrazada de PP´s que el poblano está dejando a sus sucesores. No habría tregua alguna. Es acabar ahora sí y definitivamente con quien pretende estar en las boletas para Presidente en 2018, buscando alianza también con sus enemigos de su propio partido el PAN (locales y nacionales). Es ganarle a Moreno Valle desde antes de las elecciones, no esperar a la campaña. Escenario muy difícil de ocurrir también, reitero, por las señales que vemos todos los días acerca de una muy buena amistad entre el Gobernador y muchos en el Gobierno Federal, incluidos los presidenciables Meade, Osorio Chong o Aurelio Nuño. El único que se sale de esta categoría de amistad es Manlio Fabio Beltrones.
Pues ahí tienen ustedes todas las versiones que he escuchado –palabras más, palabras menos- en las últimas semanas. Como vemos y sabemos de cualquier ámbito de la vida, todas pueden tener una cierta dosis de verdad y de mentira.
Si me preguntan cuál es la que tiene más probabilidad de ocurrir, me voy por una mezcla de los escenarios “moderados”. O sea, yo creo que ningún actor quiere perder y que harán hasta lo imposible por lograr su objetivo de ganar. Pero también sé que en los altos niveles de la política mexicana, casi siempre, prevalece el dicho de que “más vale un buen arreglo… que un buen pleito”.
¿A quién se le alinearán los astros esta vez?
LA NOTA AL PIE…
Me ausento unos días en este espacio y en mi programa de radio (Al Pie de la Letra, por Live365 en Al Portador y también en los links de Status). Invitaciones de mi profesión me llevan un poco lejos. Les informo en dónde andaré cuando estemos por allá. Gracias y saludos a todos.