Como es posible que a más de uno se le ocurrió ponerse la Banda Presidencial solo para emular al famoso “Varguitas” de la película de “La Ley de Herodes”; y luego piensan que todo se arregla con un“disculpe usted, no lo sabía”.
No es posible que lleguen a un puesto de importancia como lo es una presidencia municipal sin la más mínima educación de ninguna especie: ni política, ni cívica, ni histórica; unos verdaderos ignorantes, según algunos de ellos mismos lo asumen, ¿penoso, no?
Pero lo peor de todo aún no se ha comentado aún en esta columna; y para muestra un botón, bueno uno o dos botones: Funcionarios elegidos por elección popular y también los que fueron designados por sus jefes, se burlan día a día por su ignorancia, falta de educación y sobre todo falta de respeto a la comunidad a la que se deben.
En primer lugar tenemos al edil de Izúcar de Matamoros, al de Pueblo Viejo en Veracruz; y que decir de José Luis Galeazzi Berra, presdiente municipal de Atlixco, esa parte bellísima de Puebla que se ha ganado a pulso eso de “Atlixco de las Flores”, donde tuve el honor de cursar mis estudios de Educación Secundaria en la querida, respetada e inolvidable ESFMO, Escuela Secundaria Federal Melchor Ocampo.
Pues bien, no obstante ser el presidente municipal de esa demarcación por segunda vez en su vida, este señor Galeazzi, cual pequeño hombrecito con complejo del General Patton, o algo así; se disfrazó en los festejos patrios de “Policía”, cuando en su vida ha tenido el honor de ser integrante de ningún cuerpo de éste tipo, nunca ha tenido el privilegio de ser un policía, un verdadero servidor público y no solo un saltimbanqui de la política.
¿Quién lo asesoró? Seguro fue a quien intentó colocar como secretario de seguridad en Atlixco, tratando de engañar al Gobernador del Estado, Rafael Moreno Valle Rosas: nada menos que Amadeo Lara Terrón y a su patiño un tal Loya, que acostumbraba disfrazarse de integrante de los cuerpos policiales, sin haberlo sido nunca y que tuvo como máximo logro el ser un obscuro empleado del C4 en el norte, además de ser protegido de Lázaro Gaytán y de sacarse unas fotos, al estilo Adolfo Hitler, en la estatua que se colocó en honor a los policías (con lágrimas de cocodrilo y todo) en la colonia La Paz.
¿Qué le picó a este tipo al no darse cuenta que también le faltaba el respeto a nuestro Ejército Mexicano al pararse disfrazado junto a un militar de carrera de verdad, saludando a la bandera al “Cantinflas Style”, solo para satisfacer sus megalómanas fantasías? Y que decir que durante el desfile, parecía Reina de la Primavera utilizando grados de Comisario General que nunca se ha ganado, que ni siquiera sabe lo que significan, mientras caminaba sonriendo y saludando de derecha a izquierda.
Emulo de Fox en cuanto a sus enfermedades psicológicas (que la prensa trató en su momento), ¿qué no deberían de aplicarle a este tipo de raros seres también el examen de control y confianza?, ¿es digno de usar ese uniforme por habérselo ganado?, ¿anda armado?, o solo quiso parecerse a Felipe Calderón en sus tristes presentaciones con chamarra de militar que le quedaba grande en todos los aspectos?.
¿Qué sigue?
¿También va a disfrazar a sus hijos de coroneles o generales, o tal vez quiso parecerse a sus compañeros juveniles de su partido en Jalisco y ya salir del escondite e iniciar con su grupo de Neonazis? No sé qué será.
Tipos que se visten de policías, utilizando estilos fuera del reglamento, en lugar de uniformarse adecuadamente, ocasionando así que nuestros elementos sean el hazmerreír de los ciudadanos, ¿qué a estos tipos no les dijeron que debieron al menos leer manuales al respecto?, y si estos no existieran ¿no sabe que es la costumbre? .
Mientras tanto se burlan de nosotros, pues además de de disfrazarse, dan de baja a nuestros policías de años, destruyendo tradiciones de los cuerpos de seguridad, poniendo en entredicho el respeto y la atención que le tienen a la comunidad.
En fin, que ya no se sabe hasta cuándo se terminará esto, pensábamos que en la administración municipal pasada lo habíamos visto todo, pero no; tal vez solo sean una serie de farsas para festejar el estreno de la exitosa película de “Cantinflas” y caracterizan de esa manera para poder decir con todo el pulmón abierto… ¡A SUS ÓRDENES JEFEEEEEEE¡ caray, al fin y al cabo en éste mundo bizarro todo puede ser.