Se llama Xabier Albizuri. (Así, a la vasca).
Mejor conocido en los pasillos de la dependencia como “El Principe Encantador”, llego de la mano del actual secretario y ante todo el personal fue presentado como el “secretario particular”.
Ocupó la oficina asignada para tal puesto y desde entonces a la fecha, opera como tal: él decide quién entra y quién sale de la oficina de Tony Gali, revisa y organiza las agendas, por sus manos toda la documentación dirigida al secretario; junto con el titular administrativo, Luis Artasánchez, promueve y remueve proveedores, entre otras cosas.
Tan es celoso de que nadie se acerque a su jefe sin su consentimiento, que mandó colocar una puerta electrónica que separa el cubículo de la secretaría particular su oficina y la del mismo secretario, del resto de los mortales.
Así, cualquiera que desee tener una audiencia con Gali Fayad, forzosamente tiene que pasar por el “filtro Albizuri”.
Todo esto, con una salvedad: Oficialmente, él no es el secretario particular.
Así lo indica la página de transparencia de la propia secretaria:
De acuerdo con el documento oficial, el cargo lo ocupa Gerardo Roldán Nuñez, quien en los hechos trabaja como segundo de a bordo de Albizuri, vamos, es como su recadero.
Por cierto, aunque lleva más de dos sexenios en la dependencia, fue en la marinista en la que Roldán Nuñez pasó de ser un simple analista a brazo derecho de la anterior secretaría particular, teniendo acceso a mucha de la información de la que ahora se le investiga al ex secretario, por lo que para muchos es inexplicable que siga trabajando ahí, aunque para muchos otros es normal dado que supo venderse bien.
Volviendo al tema, el nombre de Xabier Albizuri no figura en ningún departamento y oficina de la Secretaría de Infraestructura, como bien puede verse en la referida página oficial, por lo que saltan las siguientes preguntas: ¿Qué hace?, ¿Cuál es su status en la dependencia?, ¿Cuánto cobra?.
Es un hecho que empleado de base no lo es, y dada la importancia que le ha dado su jefe en la misma secetaría, es un hecho de que no cobra lo que el catálogo de puestos establece, en el rubo de “analistas” o empleados de base o de confianza de tercer nivel.
http://transparencia.puebla.gob.mx/phocadownload/general/fraccion-iii/formato_catalogo_puestos1.pdf
¿O será acaso que, como en el sexenio pasado, Gerardo Roldán cobra el sueldo con el máximo tabular para “secretario particular·” y de ahí le tiene que dar su parte, obviamente mayor, a Albizuri?
Ahora solo falta que, como en otros muchos casos documentados por la prensa, salgan con el garlito que “la información sobre el tal Albizuri está reservada para no exponer y violentar las garantías de seguridad personal de su jefe” o algo así por el estilo.
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