Hace apenas once años, en México se conmemoraba los cincuenta años del voto femenino, lucha precedida por una serie de movimientos regionales que fueron marcando su llegada.
Puebla en aquella época, se encontraba en la etapa del avilacamachismo y el presidente a nivel regional del PRI poblano José I. Morales, invita a un grupo de mujeres para reorganizar el sector femenil de esta organización política, designándose a la profesora Carmen Caballero de Cortés para presidir esta organización.
Carmelita –como era conocida- ya era para entonces fundadora y presidenta de la Agrupación Civil de Mujeres Poblanas y el tema de las sufragistas ya permeaba para este momento en todos los sectores de la población.
Se convoca a una comisión de mujeres de Puebla para ir a la ciudad de México a la Convención Nacional del PRI, encabezadas por Carmen Caballero de Cortes, ahí entre muchas otras destacadas mujeres, forma parte de la delegación poblana de mujeres Bertha Yeverino Muñoz, una mujer joven, miembro de La Agrupación de Mujeres Poblanas, que para entonces era ya considerada como la primera mujer autorizada como locutora por la Asociación Mexicana de Locutores, que ya había fundado un programa de radio infantil “Comandos Madrugadores Peñafiel” que transmitía la estación de radio de Tehuacán Puebla; destacada deportista en el basquetbol, que para entonces había iniciado ya su carrera en la política.
Y juntas presentaron un amplio documento que refleja el sentir femenino de aquella época que las historiadoras han mencionado es una “suma de serias críticas y severos cuestionamientos que se encontraban sumergidos en las conciencias femeninas”.
Esta propuesta analizaba el papel de las obreras y las violaciones al artículo 123 de la Ley Federal de Trabajo, preguntándose ¿qué había pasado entonces con la Revolución mexicana? y la protección que de estos derechos en la Constitución de 1917; una fuerte crítica a la Secretaría de Educación Pública y a la Secretaría de Salubridad y Asistencia contiene también el documento; una revisión al papel de la mujer campesina que se sujetaba sólo al jornal del marido; a los centros de cultura superior, para establecer pre vocacionales, tecnológicos y la prestación de un servicio social gratuito antes del examen profesional; que planteaba también, la difícil aceptación de mujeres que a pesar de adquirir sus títulos profesionales en las mismas condiciones que los hombres no encontraban oportunidades en la administración pública; y, por supuesto, la promoción del acuerdo para la participación directa de las mujeres en toda clase de actividades y para permitir ostentaran también las representaciones de elección popular. (Ana Maria Huerta Jaramillo. 1953: Las mujeres poblanas y el derecho al voto. Significados preliminares).
Muchos fueron los actos previos, muchas las entrevistas en que participaron este grupo de distinguidas mujeres poblanas con Adolfo Ruiz Cortines que dieron paso a adquirir con plenitud los derechos políticos y en todos ellos Bertha Yeverino Muñoz presente, con la misma claridad que todas ellas tenían: abanderaban causas justas y no una concesión como muchos pregonaban.
El movimiento sufragista culmina en 1953 legislativamente hablando, pero continúa en todas las regiones del país con un gran movimiento social por los derechos de las mujeres y para generar las acciones que permitieran dar vigencia al artículo 34 de la Constitución y hacer efectiva la transformación ciudadana de las mujeres mexicanas.
Y los partidos políticos se vieron obligados a enarbolar las causas de las mujeres y la aportación de Berthita Yeverino fue muy vasta; continuó con sus actividades en el Sindicato de la Radio, sección Puebla, que la condujeron a convertirse en la Gerente de la radiodifusora WEWJ de Tehuacán; promovió entre muchas otras acciones, la construcción de campos deportivos, campañas de alfabetización.
En 1972 fue electa Diputada por el distrito de Tehuacán, y con ello fue parte de La XLV legislatura del Congreso del estado, logrando ser la primera mujer presidenta del Congreso poblano, en una de las etapas más complejas de la historia política poblana. Fue esta legislatura 1972-1975 la que atestiguó el paso de dos gobernadores interinos Gonzalo Bautista O´farrill y Guillermo Morales Blumenkron.
A Berthita le tocó también participar en la organización de diversos eventos que en Puebla y en todo el país, se realizaron durante 1975 por la Declaratoria de Año Internacional de la Mujer, fue Regidora del H. Ayuntamiento de Puebla, Recaudadora de Rentas en San Martín Texmelucan, Tepeaca, Huejotzingo y Atlixco y miembro de la Organización Mundial de los Derechos de las Mujeres de la ONU, fue Secretaria femenil del Consejo para la Integración de la Mujer (CIM) del PRI a nivel estatal en la década de los 70as. (Soto América, Mujeres del siglo XX, pp205 y 206).
Regresa nuevamente como dirigente a finales de los 80 y principios de los 90. Y después de ella, algunas otras ocupamos la dirigencia de mujeres del PRI y encontramos en Berthita en todo momento el consejo y el acompañamiento. Quien de las mujeres de mi generación en el PRI no recuerda el enorme cariño, confianza, respaldo y defensa que en todo momento recibimos de Berthita.
Toda una vida al servicio de Puebla, siempre reconocida, siempre respetada.
Amanecía el pasado jueves 11 de agosto del 2011 y por su familia nos enteraron de que BERTHA YEVERINO MUÑOZ había fallecido.
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