Al contrario de lo que ocurre en el PRI –donde hay doce o más desbocados potros-, en el PAN la caballada que disputa la candidatura a la Alcaldía capitalina está más que flaca. Escuálida. Y casi compuesta por jamelgos.
Y el motivo no es otro: Saben a la perfección que las preferencias electorales no favorecen para nada a su partido. Yo le adelanto a los masoquistas que a veces me leen, que de acuerdo a nuestras últimas mediciones (que publicaré en unos días más), el PRI sigue llevándole unos veinte puntos porcentuales al PAN en las preferencias ciudadanas municipales. Y la tendencia tiende a crecer.
Así, hay pocos azules –o casi nadie- que realmente quieran aventarse a una aventura que se antoja suicida, al menos al día de hoy.
Y lo peor, las épocas más dañinas para el PAN aún están por venir. También de acuerdo a nuestra última encuesta sobre el tema (mañana se las muestro, lo prometo), el Presidente Felipe Calderón ahora sí está en su peor momento de evaluación ciudadana y los poblanos lo está reprobando de fea manera. Nunca había yo registrado (el BEAP, pues, en su mediciones) una desaprobación tan alta a los últimos dos Presidentes de la República panistas. Ya lo verán, están de preocuparse las cifras.
Por eso, reitero, hay tan poca inquietud blanquiazul para disputar la candidatura a una plaza que se mira por el momento inalcanzable. Claro, en el PRI ocurre exactamente lo contrario, como veíamos ayer.
Y debo reconocer que el único “aventado” que ha manifestado su disposición para buscar la candidatura capitalina es el Diputado Eduardo Rivera. Porque habría quizás dos más, pero que decidirían buscar este cargo sólo por “descarte”. Uno es el Senador Humberto Aguilar y la otra es la señora Ana Teresa Aranda. Por el momento nadie más ha dicho nada.
Veamos. Otros mini FODAS, pues.
Lalo Rivera es un joven inteligente, lo sé bien. Se ha preparado y tiene ya una notable experiencia partidista y legislativa. Sabe expresarse y maneja buena dialéctica. Su único problema –pequeño- es que no es conocido por la ciudadanía. Está muy lejos del posicionamiento de una Ana Teresa Aranda. Le costaría mucho trabajo ganar una elección constitucional en estos momentos. Porque en la próxima elección local va a pesar mucho la situación económica nacional. Y aunque tradicionalmente en las elecciones locales pesan mucho los candidatos, ahora también pesará la difícil coyuntura económica nacional.
Y la gente le está cargando los platos rotos a los panistas. Justo o injusto, pero así está ocurriendo.
Entonces, súmele usted al poco posicionamiento de Rivera, la brutal crisis recesiva del país… y nos da un cocktel muy adverso para el PAN en la próxima elección poblana municipal.
Ana Tere Aranda daría mucha más pelea. Aún despierta el sentimiento antipriísta en no pocos poblanos, que solo necesitan un símbolo para volver a salir a votar contra el tricolor. El único –pequeño- problema es que la señora no quiere esa candidatura… por el momento. Ha dicho y repetido que jamás iría como compañera de fórmula de Rafael Moreno Valle. Aunque entre los políticos profesionales el dicho de que “más pronto cae un hablador que un cojo” es un estilo de vida cotidiano. Ya veremos a última hora qué sucede y qué decide. Eso sí, no descartemos a la señora para el Municipio capitalino. Sí que daría pelea en una situación tan adversa al blanquiazul.
Finalmente, el Senador Humberto Aguilar, ante un honesto reconocimiento de que sus canicas no le alcanzan para ser candidato a Gobernador, muy bien podría jugar la candidatura municipal. Ya lo ha aceptado, incluso. Y bueno, quizás no tenga el posicionamiento de Aranda, pero sí está mejor colocado que Lalo Rivera. Al día de hoy estaría difícil que le ganara a un embalado PRI… pero en su momento quizás también de pelea.
Eso sí, ya mediremos cada uno de los escenarios. Y usted verá esos resultados. Quién contra quién y partido contra partido.
Me queda la duda si hay alguien más que quiera buscar la candidatura en el PAN. ¿Algún “loco” y combativo paredista? ¿Algún Yunque por decreto? ¿Algún líder empresarial bien visto por la sociedad? No lo sabemos… aún.
Sinceramente, si usted tuviera la oportunidad… ¿se lanzaría en estos momentos por el PAN a la Alcaldía poblana?
Ya mejor ni pregunto.
