23-11-2024 12:50:03 AM

Una más? ¿de veras habrá incautos que caigan?

Caray, parece epidemia. Desde hace semanas se ha venido documentando en distintos medios, destacando STATUS y las investigaciones de Alejandro Mondragón y Valentín Varillas, sobre la existencia de un buen número de “empresas”, financieras o como quiera llamárseles, que, mediante una bola de patrañas, atraen a inocentes con la promesa de otorgar jugosos intereses si “inviertes” tu dinero en sus proyectos.

 Y no cabe duda que sí existen los incautos que caen en el garlito, de lo contrario, ya no seguirían proliferando estos fraudes disfrazados de empresas o proyectos inmobiliarios o de otros tipos (comercializadoras, fondos de inversión… y hasta venta de velas, como documentaba Mondragón).

    Las más famosas son SITMA, Invergroup, Inverbien… pero también están Invercapital, Burcap. Coofia, Coimsbra y no sé cuántas más. Todas con el mismo esquema: Ante la desesperación de la gente de ver reducido su dinerito, estos vivales les prometen que al meter su capital con ellos, se les devolverán intereses que van desde poco más de cualquier tasa bancaria –los más conservadores-, hasta los que de plano aseguran que tendrás rendimientos de 24, 27 o hasta 30 %, de “acuerdo a plazos y condiciones”.

    Y cada una de estas  piramidales engañifas crea su propio sistema para enredar a tarugos: que su dinero se invierte en bienes raíces y que va creciendo de acuerdo a la “plusvalía”, a la inflación y hasta a las variaciones de los tipos de cambio. Que el dinero se mete a “fondos” bursátiles demasiado seguros y que el rendimiento es “garantizado”.

    Pero lo peor, reitero: Sí hay gente que se los cree. Lo que nos demuestra, aparte de la enorme ignorancia que prevalece en la mayoría de personas que han logrado un pequeño patrimonio, la desesperación de muchos por ver pulverizado el poco capital que han hecho en años de trabajo y ahorros, alguna buena transacción comercial o venta de algún inmueble.

    Y de eso se aprovechan los vivales. Te enredan y enganchan. Te prometen garantías y “respaldo” ante un Notario Público, como si eso constituyera una seguridad jurídica-legal. Eso lo único que significa es que un fedatario público atestigua que hubo un acto entre dos personas. Y claro, esa “Acta” contiene una bola de cláusulas en donde quedas como “Socio” de una empresa en la que estás aportando capital. Y si quiebra, pues simplemente cargas con tu parte de responsabilidad social.

    En otras palabras, esas empresas no son Bancos ni están reguladas por la Comisión Nacional correspondiente. Y ya se alertó sobre el fraude que están cometiendo al prometer “intereses” o “rendimiento”, pero siguen ahí. Y se anuncian hasta en la tele o el Estadio. Y sus dueños tienen excelentes relaciones con la élite social y política local y nacional. Y nadie les hace nada.

    El problema es que un buen día desaparecen con la lana de los últimos tontos que cayeron y ni a quién reclamarle (porque a muchos de los primeros “inversionistas” sí les dan sus intereses, justamente para que los recomienden y caigan muchos más mensos). Ya ha pasado otros años (coincide siempre con épocas de crisis económica en el país)… ¿por qué tenemos tan mala memoria?

    Bueno. Pues ayer conocí una más. Me llegó a la oficina una propuesta por escrito de una tal “COBIRMEX. Comercializadora de Bienes Raíces”. Me saludan como “socio inversionista” (¿?) y afirman que tienen “proyectos a corto y mediano plazo en la construcción y comercialización de plazas comerciales”, además de poseer franquicias súper exitosas… Y lo mejor… ¿Sabe cuánto ofrecen de rendimiento? Váyase de espaldas:  $7,200.00 por cada $ 10,000.00 que invierta. O sea casi ¡75 % de interés!

    ¡Guuuuaaauuuu! No, pues seguro invierto. Eso ni Maddoff ni Stanford lo daban. Carambas, me hago millonario de la noche a la mañana. ¿Dónde firmo?
    Ya en serio: Aguas. No sigan cayendo en tonterías de auténticos rateros. Por la ambición absurda luego andan llorando lo que pierden. Mejor váyanse a perder su lana a un Casino. Ahí al menos se divierten un rato.

    Por cierto, el vivales que firma la carta es un tal “Lic. Javier Rojas Romano” y sus teléfonos son: 01800 087 3050, 01 (222) 483 07 77 y 0442225 21 15 23. Llámelo. Lo hará millonario en un abrir y cerrar de ojos.

jriverp@yahoo.com
www.beap.com.mx

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