Los líderes más notables que ha tenido México en los últimos años son, a nuestra manera de ver: Manuel Clouthier, Luis H. Álvarez, Carlos Salinas de Gortari, Carlos Castillo Peraza, Diego Fernández de Ceballos y Vicente Fox. Todos ellos -individual y colectivamente- propusieron y lograron importantes reformas y trascendentes cambios culturales, políticos, económicos y sociales en el país, que después de ellas, ciertamente reorientó su marcha.
Andrés Manuel López Obrador no puede ser excluido de esta lista, si bien hay que señalar que lejos de proponer políticas públicas que fomentasen el desarrollo, se aplicó a explotar resentimientos mediante argumentos deleznables que fueron llevando su movimiento a actos de barbarie que agraviaron al país y nada tienen que ver con un Estado democrático. Francamente dudamos en incluir a Elba Esther Gordillo, quien sin duda ha sido un factor, no de cambio, pero si un elemento político insoslayable. La alusión era inevitable…
Al declinar el liderazgo de Vicente Fox, quien no se atrevió a aprovechar el inmenso capital político que tenía al asumir el poder para instrumentar los cambios por los que habíamos luchado, y también al darse la molicie de un PAN sujeto a los controles del Yunque -que para entonces era conducido por personas que no vivieron la lucha- sino que llegaron en tiempos de cosecha a ocupar puestos en la burocracia dorada a costa de reprimir todo liderazgo que emergiera, SÓLO QUEDARON LOS INTELECTUALES LIBERALES COMO CRÍTICOS DE UN SISTEMA en el que no parecen tener operadores que orquesten acciones en pro de la democracia…
Desde periódicos como Reforma, Universal, Excélsior, Milenio, desde Imagen, Fórmula, IMER y otros grupos de radiodifusoras, también en las televisoras como canal 11, Cadena 3, Televisa y Azteca, distinguidos periodistas e intelectuales, liberales, de centro izquierda o de franca izquierda, varios de ellos investigadores en nuestras instituciones de excelencia como ColMex, CIDE, CIESAS, UNAM y otras más, realizan una profunda y acertada crítica al gobierno y al sistema político, y a pesar de las notables diferencias entre sus puntos de vista, van coincidiendo en aspectos torales que en esta serie de artículos ya hemos enunciado…
Partidocracia, balcanización del autoritarismo, desconcierto de las élites, impunidad y otros factores que llevan a más de uno a mencionar la eventualidad de un Estado fallido… se dan numerosos y poderosos argumentos de en cuanto está fracasando el Estado Mexicano y en la incapacidad de la clase política para generar propuestas que muevan a todos en pos de objetivos comunes, sin embargo, desde estas instituciones tampoco se plantean proyectos, sólo crítica y análisis…
Esta intelectualidad se ha mantenido al margen de los partidos pero ha influido poderosamente en el pensamiento de muchos líderes políticos. Así sucedió antes de la alternancia cuando la docena trágica, y también durante el régimen del presidente De la Madrid, durante las reformas salinistas y en la antesala de la alternancia, pero ahora no aparece en el país una camada de líderes bien articulados que lleguen a nutrir a un partido que se presente como la gran alternativa…
Parece que esos líderes sociales que como Manuel Clouthier emergieron desde la sociedad civil para nutrir al sistema político con planteamientos muy diferentes a los ya gastados de la cleptocracia, ahora han sido asimilados y despachan ya en las oficinas gubernamentales con el mismo discurso que desde entonces estaba agotado…
¿Donde están hoy las reservas que pueden revitalizar a México?
Intelectuales y periodistas juegan un papel vital pero insuficiente. No habrá prosperidad sin una democracia eficiente, y esta no es dable sin libertad. La libertad de pensamiento y la libertad de expresión no bastan para gestar democracia y buen gobierno. ES INDISPENSABLE QUE QUIENES GOBIERNEN SEAN PERSONAS LIBRES Y POR TANTO CAPACES DE PROYECTAR Y PERFECCIONAR ESA LIBERTAD, pero hoy la clase política mexicana está sometida a la burda manipulación de los amos de los partidos
ES INDISPENSABLE LA OPERACIÓN POLÍTICA DIRECTA EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS y esta sólo puede darse por la disidencia que hay en cada uno de ellos, y no nos referimos a los inconformes porque no les concedieron alguna gracia y que migran a otro partido, sino a quienes DISIDEN… a quienes por sus ideas y proyectos innovadores se les ha marginado, a quienes haciendo política se han mantenido al margen de las redes de complicidad que manipulan a los partidos y al sistema…
Si se asumen como válidos los párrafos precedentes, intelectuales y periodistas tienen dos tareas fundamentales…
* Complementar el análisis y la crítica con la denuncia específica de la forma -muchas veces delictiva- en que los amos de los partidos controlan a la clase política e impiden los cambios de -izquierda y de derecha- que urgentemente requiere el país…
* PROYECTAR A LOS LÍDERES EMERGENTES CON PROYECTO DE PAÍS, que puedan modificar a los partidos desde su interior y entusiasmar a la gente con metas concretas que trasciendan dogmas y mitos haciendo viables en corto plazo mejores formas de vida que puedan ser replicadas y perfeccionadas más allá de entelequias y aporías…
Debemos construirnos el mejor futuro que podamos imaginar, plantearnos utopías de esas que siendo imposibles en el corto plazo son realizables en el tiempo, y PARA ELLO URGEN LIDERAZGOS POLÍTICOS VISIONARIOS y estos están ahora mismo al interior de los partidos, pero sofocados por dirigencias anquilosadas aplicadas a impedir cualquier cambio en el statu quo…
