Frenar el alza de precios de productos de la canasta básica es el principal problema que debería atender el Presidente Felipe Calderón, de acuerdo a la opinión mayoritaria de ciudadanos del Municipio de Puebla, inclusive antes que la violencia que ha generado la lucha contra el narcotráfico y desde luego, antes que la famosa reforma de PEMEX.
Esto es lo que piensan los poblanos capitalinos, de acuerdo a la última encuesta que hemos levantado en el BEAP, S.C., la semana que terminó; además cuestionamos a esa misma muestra sobre la evaluación que hacen de la gestión del actual Presidente de la República (tracking que venimos realizando desde que inició su administración).
La pregunta que hicimos en esta ocasión fue: “Para Usted ¿Cuál problema debería resolver primero el Presidente Felipe Calderón?” y entonces se le enumeró al encuestado una pequeña lista de tres opciones. El resultado del ejercicio quedó de la siguiente manera.
Un mayoritario 55.8 % respondió que el principal problema que debe atender el Presidente Calderón es el alza de precios en productos básicos. El 15.7 % dijo que la violencia e inseguridad generadas por el combate al narcotráfico. Y un 14.5 % expresó que lo primero que debería resolver Calderón es la reforma y transformación del PEMEX.
11.5 % de los encuestados respondió que Calderón debe resolver todos los problemas. Un 0.6 % dijo no saber de los temas cuestionados, un raro 1 % expresó que “Ninguno” de ellos y 0.8 % no contestó la pregunta.
Con las respuestas anteriores quedan claras varias cosas:
Primero, que el principal problema de la gente es, como siempre, su bolsillo y el consumo familiar. Incluso por encima de la inseguridad, que normalmente es el tema que más preocupa localmente a los ciudadanos.
También es evidente que la carrera de precios es un hecho palpable para el ciudadano, a diferencia de las cifras alegres gubernamentales, que han venido ocultando a la opinión pública el verdadero comportamiento inflacionario que existe en todo el país.
Otro asunto que llama la atención es que a poca gente le preocupa realmente el tema de la reforma de PEMEX. Al menos como prioridad presidencial. Seguramente porque lo miran lejos de su realidad cotidiana. Esto es interesante, con miras a plebiscitos o consultas ciudadanas sobre el tema, que estarán, evidentemente, sesgadas de la realidad.
Adicionalmente, la encuesta también incluyó la evaluación ciudadana al Gobierno del Presidente Calderón. Como ya dijimos, es el seguimiento (tracking) quincenal que hemos venido realizando en el BEAP desde que inició la actual administración federal.
En la pregunta que busca la calificación (del 0 al 10) ciudadana al Presidente, éste obtiene, como promedio en esta quincena, un 6.65. No es totalmente mala, aunque no ha vuelto a alcanzar calificaciones mayores a 7, como en los mejores tiempos de su administración, al inicio y a mediados de 2007.
En cuanto a nivel de confianza (pregunta que busca saber cuánta confianza inspira el Presidente a los ciudadanos para resolver los problemas del país), del 0 al 10, Calderón obtiene un promedio de 6.33. Tampoco mala, aunque para mucha gente dar un 6 no es bueno.
Finalmente, preguntamos al ciudadano si aprueba o desaprueba la forma como está gobernando al país, el Presidente Felipe Calderón. Y aquí es donde generalmente se mide en realidad el sentir social. Mientras que un 48.3 % de personas lo aprueba, el 37.8 % lo desaprueba. Baja unos cuatro puntos en aprobación y sube tres en desaprobación, en comparación con nuestra medición anterior.
¿Qué ha pasado? Ya lo vimos: La gente comienza a experimentar la crisis inflacionaria y siempre responsabilizará a los gobiernos de esa situación.
Y, como sabemos, lo peor aún está por venir. Saque usted sus propias conclusiones.
Nosotros seguiremos midiendo el pulso de los poblanos. Esto es, por el momento, lo que opinan en porcentajes. Aunque, como siempre, usted tiene la mejor opinión.
