Por un momento no se oye nada en el taxi, hasta que el taxista dice:
-¡Mire amigo, jamás haga eso otra vez! ¡ Casi me mata del susto!-
El pasajero, impresionado le pide disculpas y le dice:
-No pensé que se fuera asustar tanto si le tocaba el hombro.-
El taxista le dice:
-Lo que pasa es que es mi primer día de trabajo como taxista.-
-¿Y qué hacía antes?
-¡Fui chofer de carroza funeraria durante 25 años!-