Con una inversión de 17 millones de pesos, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla puso en marcha el Centro de Detección Biomolecular de Enfermedades Emergentes, cuya función será abordar de forma integral el estudio de enfermedades infecciosas y contribuir a la capacidad nacional para atender el surgimiento de brotes de diversos males.
El Rector Enrique Agüera Ibáñez y el Gobernador Rafael Moreno Valle Rosas pusieron en marcha el nuevo inmueble, dotado de equipo altamente especializado y construido bajo las más estrictas normas de seguridad, que busca colocarse como un centro regional de referencia y diagnóstico de enfermedades infectocontagiosas de alto nivel.
En su discurso, el Rector destacó que ante la aparición de problemas de salud pública ocasionados por la aparición de la influenza AH1N1 hace dos años, la Institución se propuso crear un centro de interés no sólo local sino nacional que diera respuestas, desde el conocimiento y la ciencia, a este tipo de fenómenos.
“Desde entonces nos propusimos crear un área de investigación para concentrar la experiencia de nuestros investigadores y generar un centro multidisciplinario que permitiera a la Universidad ponerse a la vanguardia de la investigación y la generación de propuestas de solución”, puntualizó.
Al no estar exentos del surgimiento de nuevas enfermedades, el Rector advirtió que el estado y el país deben estar preparados para enfrentar el riesgo, en este caso en alianza con el Gobierno del estado, a través de la Secretaría de Salud, a cargo de Jorge Aguilar Chedraui.
Agüera Ibáñez aprovechó para agradecer al Mandatario poblano su respaldo para cristalizar este tipo de proyectos y precisó que la aportación de 350 millones de pesos por parte del gobierno de Moreno Valle Rosas a la Universidad permitió, entre otras cosas, construir este inmueble.
“Planeamos hacer un inmueble más pequeño; la verdad es que no nos alcanzaba para más, pero el Gobernador nos ha asignado poco más 350 millones de pesos, que entre otras cosas, nos permitió construir dos niveles para este inmueble. Por eso se logró tener ya una gran instalación que corresponde a las necesidades de este esfuerzo científico y de investigación”, agregó.
Al tomar la palabra, Moreno Valle Rosas se congratuló por la apertura de este nuevo centro de investigación al referir:
“En la época de transición el Rector me comentaba sobre el proyecto y sus alcances, y pensé que era insuficiente, y que era necesario inyectar más recursos del gobierno, y hoy me da gusto que esa plática se traduzca en un hecho más en beneficio de Puebla porque no va a ser un centro de investigación aislado, al contrario, estará coordinado con la Secretaría de Salud”.
De acuerdo con Pedro Hugo Hernández Tejeda, Vicerrector de Investigación y Estudios de Posgrado, el Centro de Detección Biomolecular de Enfermedades Emergentes tendrá capacidad para procesar muestras de distintos microorganismos que puedan ocasionar brotes de diferentes males infectocontagiosos, con el objetivo de prevenir su propagación.
Enfatizó que el edificio fue construido bajo las normas mundiales más estrictas de seguridad, establecidas por el INDRE, por lo que el laboratorio cuenta con la clasificación nivel II de seguridad.
Recordó que el proyecto nació como resultado de la contingencia sanitaria que vivió el país hace dos años por el surgimiento del virus de la influenza AH1N1, con la iniciativa del Rector Enrique Agüera.
Detalló que el centro se edificó con recursos del Fondo Mixto (FOMIX), Conacyt Gobierno del Estado con una bolsa de 11 millones de pesos, mientras que la BUAP aportó 6 millones de pesos más. Agregó que en el futuro el centro contará con su propio laboratorio de mezclas, con la idea de fabricar medicamentos y vacunas.
Tras la inauguración, Agüera Ibáñez y Moreno Valle Rosas visitaron las obras del estadio que se construye en Ciudad Universitaria (CU), también con financiamiento del Gobierno Estatal y el cual, ofreció el Mandatario, deberá estar listo en la primera quincena de enero de 2012.