Karina Fernández |
Aristóteles Belmont, dirigente estatal de Morena, negó que el partido esté desdibujado en Puebla pues aseguró que en distintos momentos han señalado los excesos y abusos cometidos por las pasadas administraciones.
Sin embargo, a diferencia del PAN que sí formalizó las acusaciones contra Claudia Rivera Vivanco por presuntas irregularidades en su gestión, Morena se ha quedado en el terreno de lo mediático sin acudir a la Fiscalía General del Estado.
A decir del líder estatal, mediante ruedas de prensa han respondido las críticas y reclamos de partidos como Acción Nacional que cumplen su papel como oposición de los gobiernos de Morena.
“Esta dirigencia tiene claro que la solución es regresar a lo que nos movió; nosotros siempre hemos señalado las actuaciones de gobiernos anteriores que han sido pésimos en la capital y el estado y realizado ruedas de prensa para señalar a estos gobiernos y expresar el respaldo a los nuestros”, dijo.
Vía telefónica, comentó que la marca en Puebla está ocupada en reagruparse y avanzar a la reorganización tal y como lo sugirió el gobernador del estado. Expresó que el partido tiene que regresar a sus orígenes, con un trabajo territorial y de cercanía con los ciudadanos.
Sostuvo que desde hace meses que asumió los trabajos del partido se diseñó una estrategia para que la militancia se reencuentre con la institución, mediante la difusión de información y acercamiento con la gente, realización de talleres y trabajo de formación política.
De la eventual renovación de la dirigencia estatal de Morena, dijo que en próximos días el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y el Consejo Político Nacional darán información sobre la posibilidad de que entre octubre y noviembre de este año se concrete el proceso que se ha postergado desde 2018.
