Karina Fernández |
Los homicidios dolosos en el estado de Puebla registraron una disminución durante 2021, contrario a las muertes por COVID-19 que se duplicaron en ese año, cuando el virus mutó a variantes más transmisibles y letales.
Esto significó que por segundo año consecutivo, el coronavirus ha provocado más decesos que la inseguridad.
El reporte diario de homicidios dolosos generados por el equipo interdisciplinario constituido por la Secretaría de Seguridad Pública Ciudadana, la Sedena, la Marina y la Procuraduría Federal de la República arrojó 916 ejecuciones a lo largo de hace un año.
La cifra se ubicó por debajo de los asesinatos registrados en 2020 con 982 homicidios reportados, lo que significó una disminución del 6.8 por ciento con 66 casos menos.
No obstante y que en el último bimestre del año hubo más de 90 ejecuciones en promedio en Puebla, y días como el 31 de diciembre cuando se registraron hasta 11 asesinatos.
Los homicidios han arrebatado menos vidas que la pandemia pues de acuerdo con la información proporcionada por la Secretaría de Salud, en el último año hubo 10 mil 416 muertes por el mortal virus, casi el doble a las 5 mil 994 contabilizadas en 2020.
A pesar de que el año pasado comenzó la vacunación contra COVID-19 en México, Puebla fue de los estados que menos biológico recibió en las primeras jornadas, y llegó a ser el último en población inmunizada.
En este contexto, la entidad se enfrentó a nuevas variantes del Sars-CoV-2, resistentes a las vacunas y se caracterizaron por ser más contagiosas, lo cual llevó a que Puebla cerrará el año con 16 mil 411 fallecidos acumulados.