Por Karina Fernández
El confinamiento y el cierre de dependencias a consecuencia de la pandemia repercutieron en el incremento en casos de violencia familiar que arrojó el informe actualizado de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Así lo consideró la presidenta de la comisión de Igualdad de Género en el Congreso local, Rocío García Olmedo quien reconoció que el encierro recrudeció este problema que derivó en 9 mil 125 carpetas de investigación.
Sin embargo, reconoció que la pandemia también puso en evidencia que las instituciones encargadas de prevenir y atender la violencia familiar no están preparadas para actuar en condiciones adversas como las que se presentan.
“Efectivamente las instituciones y como yo creo que a todos nos agarró sin tener una prevención en torno a algo que no sabíamos hasta donde iba a llevarnos. Conociendo ahora el alcance del grave problema que se tiene yo creo que todo eso influyó evidentemente”, dijo.
En este sentido, la priista planteó que cada institución involucrada en casos de violencia familias, como la Secretaría de Igualdad Sustantiva, haga una autoevaluación para detectar las deficiencias de los programas y acciones aplicadas y los corrija en este año que también inició con un nuevo confinamiento.
“Los números son terribles en relación a la violencia que ejercer contra las mujeres. La pandemia vino a detener el avance en relación a las políticas públicas y al papel que se había diseñado para iniciar con la atención de todas estas cuestiones”, dijo.
En el caso del papel que juega el Poder Legislativo, en comisiones se aprobó una reforma al Código Penal para sancionar hasta con 12 años de cárcel el delito de violencia intrafamiliar cuando la víctima sea un menor de edad.
