Por Karina Fernández
Los encobijados y ejecutados reportados en San Martín Texmelucan son reflejo de la crisis en materia de seguridad que reporta este municipio y que arrastró a lo largo de 2019, cuando se contabilizó al menos un homicidio por semana.
La detención del director de Seguridad Pública municipal, Luis Bustamante, acusado de secuestro confirma la situación que enfrenta el municipio y que ha abierto la posibilidad de que el gobierno de Puebla asuma el control de la seguridad.
El reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) reflejó que de enero a diciembre pasado se contabilizaron 69 homicidios, cifra superior al promedio municipal que ese año fue de siete eventos por demarcación.
De esta cifra el 80% fueron homicidios dolosos en los que hubo de por medio el uso de armas de fuego, armas blancas u otros elementos no especificados.
También rebasó el promedio municipal referente a lesiones. A lo largo del año pasado se abrieron en San Martín Texmelucan 226 carpetas de investigación por este delito, es decir 3 por cada 100 que se registraron en todo el estado.
En el municipio gobernado por Norma Layón se registraron dos feminicidios y un secuestro; 41 robos a casa habitación, 110 robos a transeúntes, y 28 robos en transporte público.
Cabe mencionar que a pesar de la incidencia delictiva que reporta este municipio no forma parte de los ayuntamientos con los cuales el gobierno de Puebla firmó el acuerdo para coordinar esfuerzos en materia de seguridad y revisar el desempeño de sus policías y altos mandos.
De acuerdo con el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa quien asuma la dirección de la policía en esta región del estado tendrá que ser avalado por los integrantes de la Mesa de Seguridad del estado.