Por Alejandro Mondragón
Decepcionado porque su padrino político, Guillermo Aréchiga Santamaría, no lo invitó a incorporarse a la Secretaría del Transporte, el actual secretario de Administración del Ayuntamiento de Puebla, Leobardo Rodríguez Juárez, anda en busca de otros aires.
Aprovechó la presencia de David Villanueva Lomelí para la instalación del Comité de Ética y Conducta del Municipio de Puebla, con el propósito de entregarle su currículum.
¿Qué mala cara vio en el Ayuntamiento?
¿En qué pasos anda este activista de la 4T?
Tres temas candentes que seguramente le disgustarán a la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco pasan por la oficina de Leobardo Rodríguez.
El primero tiene que ver con la licitación de las llamadas cámaras de seguridad, proceso en el que pretende favorecer a la empresa Contrasys SA de CV.
¿Será motivo que en dicha firma figuren Oswaldo Jiménez, el diputado local panista, y sobrino del ex gobernador Gali, asociado con Anwar Salomón, un ex operador de la Secretaría General de Gobierno, ya distanciado del titular Fernando Manzanilla?
Rivera Vivanco prometió que durante su gestión se acabarían los dados cargados en los concursos municipales.
El segundo asunto es delicado, toda vez que atenta con un compromiso de género de la munícipe. Ella garantizó que todas las mujeres del ayuntamiento que estuvieran en categorías similares a las que ocupan los hombres ganarían lo mismo.
Y resulta que no, en diversas áreas, las mujeres perciben menos y si se atreven a reclamar, desde la Secretaría de Administración les aplican el burocratismo y acoso laboral. No tardan en explotar las protestas. Hay sospechas que la diferencia salarial se la están chingando.
El tercer caso se refiere a que por alguna razón ¡Ja! han ingresado facturas procedentes de empresas catalogadas por las autoridades hacendarias de fantasmas o fakes.
En tanto, Transparencia a cargo de Rebeca Alcaide sólo se la pasa presumiendo sus costosos viajes a Europa.
¿Cuál es la prisa de Rodríguez por encontrar chamba en otra parte? ¿Cómo explica que de su Bora viejito pasó ahora a una Tiguan del año?
¿Quién los protege? Javier Palou.
Ni duda cabe que la alcaldesa Rivera Vivanco va a tener que hacer una limpia en Secad, porque se atenta con tres principios de su gestión: transparencia, equidad laboral de género y cero corrupción.