Por Karina Fernández
Al afirmar que en ninguna batalla hay “enemigos débiles”, el candidato del PRI al gobierno de Puebla, Alberto Jiménez Merino defendió que en esta elección extraordinaria de gobernador nadie puede dar por perdido a ningún candidato.
Lo anterior después de que Marko Cortés, dirigente nacional del PAN, llamó a los poblanos a que no voten por el candidato del tricolor al asegurar que no tiene posibilidades de triunfo en la próxima elección del 2 de junio.
En entrevista, el priista calificó como una falta de respeto que el líder del PAN lo haya minimizado como Enrique Cárdenas hizo también durante el debate organizado por el INE.
Consideró que son los panistas quienes tendrían que preocuparse por la votación que recibirán el próximo 2 de junio ya que los ciudadanos vinculan a sus gobiernos con la crisis de inseguridad que heredaron en Puebla.
“Yo le digo a Marko Cortés que busque la manera de que ellos declinen a favor de Barbosa. Para mi es una falta de respeto, señor presidente del PAN, que minimicen a las personas. Nunca hay enemigo débil, nadie está muerto o perdido, esta batalla la vamos a ganar”, sostuvo.
Sobre la encuesta de El Financiero que lo pone en un rezagado tercer lugar de las preferencias electorales con apenas el 8% de la votación, Jiménez Merino defendió que la verdadera encuesta se realizará el 2 de junio, con el voto que los poblanos depositen en las urnas.
Auguró su triunfo a pesar de los actos intimidatorios en contra de alcaldes y ex alcaldes del PRI a quienes amenazan con no aprobar sus cuentas públicas si apoyan un proyecto distinto al de Morena o están engatusando con proyectos de obra.
Reservó el nombre de los priistas o de los municipios a los que pertenecen por protección de los propios involucrados, pero se darán a conocer una vez que se integren las pruebas y se presenten las denuncias correspondientes.
