Por Valentín Varillas
En el círculo más cercano al próximo dirigente nacional del blanquiazul, Marko Cortés, tienen bien claro que la primera gran coyuntura que tendrán que enfrentar como jerarcas de la derecha nacional, tendrá que ver con la resolución del caso Puebla.
Para bien o para mal.
Y es que, quienes llegarán al cargo el 11 de noviembre, consideran que una resolución a favor por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación está lejos de ser un asunto de mero trámite.
Al contrario.
El equipo jurídico del blanquiazul, conoce a fondo el sentido de las impugnaciones presentadas por Morena en la pasada elección a gobernador y considera que los magistrados pueden llegar a encontrar elementos para declarar la nulidad del proceso.
Es más, están conscientes de que ellos mismos, en distintas elecciones que han enfrentado a través de su vida como partido de oposición, han acudido a las instancias encargadas de procurar y administrar justicia electoral, con argumentos muy similares a los que hoy presentan sus opositores en Puebla.
Y en en ese sentido, ya le dan forma a una estrategia de victimización mediática que utilizarán en caso de que la resolución del Trife no les favorezca.
Ésta se basa en seguir vendiendo, a través de distintos mensajes enviados a la opinión pública nacional, que el tema Puebla está resuelto, que es cosa juzgada y que Acción Nacional tiene ya a la primera gobernadora de su historia.
Mientras el tribunal no emita una resolución, la propaganda blanquiazul -operada a través de redes sociales y medios tradicionales, en Puebla y a nivel nacional- continuará con la misma intensidad.
Y es que, en la medición hecha para evaluar la efectividad de la misma, se han encontrado con que sí ha logrado impactar en el imaginario colectivo del ciudadano, simpatizante o no del PAN, que con tristeza o alegría –según el caso- sí cree que en el tema del gobierno estatal ya no hay nada que hacer.
Para bien o para mal.
Los liderazgos panistas y de los partidos que conformaron la alianza por la que compitió Martha Érika Alonso, han seguido al pie de la letra el guión diseñado para enfrentar este impasse que tiene la moneda en el aire.
Fotos, eventos, discursos, declaraciones; todo suma en momentos de incertidumbre como el que viven actualmente.
Aunque jamás lo reconozcan de manera pública.
Adelantan ya, inclusive, que si no logran amarrar la gubernatura de Puebla, culparán directamente a Andrés Manuel López Obrador de haber intervenido en la opinión de los magistrados y lo acusarán de seguir un talante autoritario y abusivo similar al que tanto ha criticado de los anteriores presidentes.
Sobre todo si los tiempos se alargan y la decisión final se da después del 1 de diciembre, fecha en la que el peje será ya presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.
