Por Shanik David
Aunque durante la sesión solemne del Congreso del Estado en la cual José Antonio Gali Fayad entregó su informe de labores, la mayor parte de los representantes de las fracciones legislativas aplaudieron los logros alcanzados durante el primer año de la actual administración, hubo quienes aprovecharon el momento para pedir al gobierno y a los partidos que se mantenga el respeto durante la contienda electoral de este año.
Una de las voces más duras fue la de Maritza Marín Marcelo, quien en representación de los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) le exigió a Gali Fayad que se garantice que no haya desvío de recursos públicos ni elección de Estado el próximo 1 de julio.
“Usted tendrá la gran responsabilidad de estar al frente del Ejecutivo en la primera elección concurrente en el estado, por tal motivo le solicitamos que sea un garante de la democracia en la entidad”, comentó la priista al emitir el posicionamiento de su fracción.
Esto, añadió, es fundamental en un escenario como el que se vive en la actualidad, en donde el sistema de partidos políticos está deteriorado y los ciudadanos necesitan garantías de que su voto será respetado.
Otro diputado que se expresó en términos similares fue Marco Antonio Rodríguez Acosta, representante de Pacto Social de Integración (PSI), aunque su llamado no fue sólo a las autoridades, sino a todos los participantes en el proceso electoral, para que se fomenten las coincidencias por encima de las diferencias.
“Hago un exhorto a todos los actores políticos a que las elecciones no afecten las instituciones, desde la trinchera en la que estemos debemos cuidar el bienestar del estado, y el que no quiera que no estorbe”, señaló.
En cambio, el posicionamiento que dio la coordinadora de los diputados del Partido Nueva Alianza, Susana Riestra Piña, pareció orientado en contra de Andrés Manuel López Obrador, al reflexionar que uno de los retos en este proceso electoral es combatir a los enemigos de la democracia, es decir aquellos que recurren a la “demagogia y populismo” y ofrecen “soluciones instantáneas”.
“El respeto a las instituciones y la defensa de nuestra estabilidad política y macroeconómica son premisas que no se pueden regatear, por eso convoco a los poblanos a evitar la polarización y privilegiar los intereses de Puebla por encima de cualquier otra consideración”, finalizó la diputada aliancista.
Al término de los posicionamientos de las fracciones partidistas hubo un momento en el que se rompió el protocolo, pues el diputado Julián Peña Hidalgo -quien no forma parte de ningún grupo partidista, intentó tomar la palabra para expresar su opinión del primer año de gobierno de Gali Fayad, lo cual le fue negado por el presidente de la Mesa Directiva, el panista Francisco Rodríguez Álvarez.
El militante de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) explicó que su intensión era señalar que más allá de los logros hay temas que faltan por atender, como la inseguridad o incluso la reconstrucción de las zonas afectadas por los sismos de septiembre.
Pero, agregó, este bloqueo sumado al cambio de sede del legislativo para evitar manifestaciones, demuestran que, contrario a lo presumido por las autoridades, no hay una apertura real para dialogar.
