Por Jesús Manuel Hernández
Lo que venía siendo un rumor creciente fue confirmado este día por el diario Reforma, Eduardo Rivera Pérez, “Lalo”, “el maestro”, se lanzará con toda una maquinaria y dinero a conseguir la candidatura del Partido Acción Nacional en Puebla, confrontando con ello el proyecto morenovallista.
Asesores especializados, estrategias bien estudiadas, discurso y acuerdos de grupos han venido coincidiendo en los últimos meses en torno al militante inhabilitado y ex presidente municipal sancionado, pero eso no importa, el papel de mártir le hará subir en las preferencias.
A diferencia de su anterior candidatura su imagen personal será cuidada por un despacho especializado, tal vez la corbata morada no vuelva a usarse.
Con esta acción, aunque ajena al jefe político del Estado, Acción Nacional da un paso adelante en su pretensión de mantener el poder en la entidad, y lo hace desde tres frentes, el institucional, donde Martha Erika Alonso viene logrando posiciones; en un carril alternativo, cercano, pero marcando diferencias aparece Luis Banck, y Lalo Rivera, desde la oposición interna.
Esas tres figuras serán a partir de ahora el centro de operaciones del panismo, no se ve ninguna otra. Evidentemente todos tienen, por el momento, el visto bueno del Ricardo Anaya.
¿Y en el PRI, qué está pasando?
Pareciera que la llegada de Javier Casique Zárate al PRI Municipal favorece a Enrique Dóger, con la salvedad de que su acción se limita a la ciudad, en un claro mensaje de otro grupo, el de Lastiri Quirós, de que Dóger puede quedarse con la ciudad a cambio del Estado, un asunto que para los tamaños del delegado del IMSS se ve lastimoso, tener que trabajar en favor de un candidato que antes de la contienda está cuestionado de ser parte de un acuerdo con el morenovallismo.
Sólo falta que a la escena lleguen los actores seleccionados por MORENA. En las oficinas de la colonia Roma en Ciudad de México están ya los expedientes de los presuntos nombres, se les revisa con lupa y sólo Andrés Manuel López Obrador tiene la pluma para palomear.
Cuatro figuras se están analizando con base en los resultados de sus gestiones en la entidad, a cada uno se le ha dado una comisión, y no precisamente para ser candidato a gobernador, es una manera de ver la capacidad y la estructura de la que son capaces.
Rodrigo Abdala, Ignacio Mier, Fernando Manzanilla y Alejandro Armenta Mier, están en la mesa. Tres de ellos ligados políticamente a Manuel Bartlett Díaz, el otro una pieza clave para desmantelar el morenovallismo.
El 2018 ya está en proceso.
O por lo menos, así me lo parece.
