22-11-2024 10:13:49 AM

Cruzada nacional ciudadana en apoyo a los integrantes de nuestros cuerpos de seguridad

Por: Guillermo Alberto Hidalgo Vigueras

¡Qué loquera¡ “No vas a poder” –Sólo a ti se te ocurre-, cosas como estas, me las han estado diciendo algunos que no confían en nosotros, o de esos pesimistas que sólo viven de cosas fáciles, de oportunidades compradas, o de criticar sin analizar y sin ofrecer soluciones reales.

“La cruzada nacional de apoyo a los integrantes de nuestros cuerpos de Seguridad” no se nos ocurrió del aire, porque no solo es un servidor, el único en éste esfuerzo, ni el Instituto Mexicano de Investigación y Desarrollo en Ciencias Policiales la única institución que colabora en esto, somos cientos y pronto miles de mexicanos, policías o no, convencidos de que para tener un cambio real y en beneficio de todos, debemos de participar razonada y activamente en el.

Ya estamos hartos de que se critique a los diferentes gobiernos de cualquier partido, a las diferentes acciones de cualquier tema, sin que realmente se ofrezcan opciones dé un cambio ofrecido por quien critica.

Se señala a los policías como responsables de cualquier problema, de toda corrupción, de toda deshonestidad, cuando estamos llenos en muchos lados de personas que se desertan de nuestras fuerzas de seguridad y se vuelven detractores de cualquier acción del país, solo por no haber sido capaces de enfrentar sus realidades, superarlas y llegar a ser alguien en la vida.

Critican y se venden, destruyen y en nada ayudan, ¿donde están esas decenas de jefes policiales que se sirvieron de nuestra seguridad y ahora viven desahogadamente a costa de haber dañado a la policía?, y esos legisladores que desarrollaron leyes sin saber del tema, ni haber tenido ninguna experiencia ni conocimiento real y ahora ni siquiera saben o se dan cuenta que dañaron a nuestros agentes a las familias de ellos investigadores, policías, marinos y militares que nos están cuidando

Venden calificaciones, se venden ellos mismos, engañan con instituciones falsas, se aprovechan de otras que sin serlo, ni siquiera se fijan en quienes contratan, se aprovechan de la novatez de alumnos quienes esperan aprender cada día más, se sirven de ellos, se mantienen de ellos y así, en todas las aéreas.

La cosa, es que ante las recientes declaraciones en diversos medios y plataformas, de que hay más de 350,000 policías que no han recibido adecuada capacitación en el nuevo sistema penal acusatorio y en lo particular en los juicios adversariales en cuanto a lo que a oralidad se refiere, nos damos cuenta que no solo los policías, sino cualquier integrante de todo cuerpo de seguridad, apoyo o auxilio, acabaran metiéndose en problemas solo por ayudar o cumplir su trabajo, por no saber hacer adecuadamente cosas como por ejemplo, llevar una acertada cadena de custodia, o lo que es peor, por no saber, o no poder verbalizar adecuadamente o llevar a cabo informes legalmente aceptables por escrito.

Aquí el problema, entre muchos más, se encuentra en que el Policía o miembro de las fuerzas de seguridad a cualquier nivel, fuerzas armadas o de auxilio, al no verbalizar, informar o contestar adecuadamente en un juicio, es muy probable que acabe tras las rejas, o fuera de su institución y por ende sin trabajo, sin poder seguir dando lo básico a su familia, y que los responsables, o probables responsables, o indiciados, o como les vallan a llamar cada año (según la moda) estarán en la calle, libres, sonrientes y totalmente impunes.

Y nos referimos a los que sean responsables de algún delito o infracción, por que aquí, no se trata de solapar a nadie sea cualquiera su estamento.

La cosa es que como hemos podido ver, por no poder llenar o hacer llevar un adecuado proceso, (que hasta en el nivel federal les ha fallado) se han soltado últimamente a cualquier numero de delincuentes de alto calado o de cualquier nivel, aumentando las filas delincuenciales que en nuestro país andan libres, y no pensamos en la probabilidad de que ahora, los cuerpos de ayuda o mejor dicho sus integrante se vallan a la cárcel, y aun saliendo lo harán con rencor y coraje contra una sociedad que los castigo sin hacer nada por ellos, solo por cumplir con su trabajo.

Y si entonces, amable lector, si usted y yo nos ponemos a hacer un ejercicio básico de aritmética, sabremos que cada vez habrá más delincuentes en las calles y mas resentidos que no les importe ya hacer nada por la seguridad de nadie, pues sabrán que el riesgo de ir a la cárcel, simple y sencillamente es muy alto.

“350,000 policías sin la adecuada capacitación”, caramba, para los que la policía es una forma de vida, una disciplina y un orgullo, no da solamente dolor, sino espanta, lastima el solo escuchar ese número.

Por eso, es que estamos integrando junto con la ciudadanía civil responsable ¡sí! leyó bien amigo cibernauta CON LA CIUDADANIA CIVIL RESPONSABLE una acción de apoyo, que ayude a nuestros elementos de estas corporaciones a tener más capacitación, mas herramientas jurídicas, técnicas y verbales, y más conocimientos que eviten poner en riesgo su libertad al cumplir adecuadamente su trabajo.

Muchas organizaciones de las cuales iremos nombrando en nuestras colaboraciones, muchos profesionistas, y cientos de policías dentro y fuera de servicio que manejan este tema, además por supuesto de cientos de estudiantes universitarios, están dispuestos a colaborar con esta acción que es un verdadero logro ciudadano de apoyo por aquellos que nos cuidan y arriesgan su vida y familia en ello.

Haciendo con esto, un nuevo acuerdo de civilidad y colaboración, para que todos hagamos adecuadamente lo que nos toca y no estemos chocando como enemigos a muerte, como si no perteneciéramos a la misma sociedad.

Unámonos como uno sólo, como lo hemos hecho siempre, como una nación amalgamada de diversas razas y formas de pensar que siempre emerge sobre sus problemas, como un pueblo, que siempre se destaco por su unión y trabajo, unámonos todos para que en este esfuerzo, recuperemos esa tranquilidad y armonía que mucho necesitamos todos, que piden las diversas sociedades y que nos exige México.

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