¡Uy que miedo!.
Que los Morales están enojados porque Roberto Morales Flores dejó finalmente la Secretaría de Salud como si las posiciones en el gabinete fueran cotos de poder para caciques en decadencia.
Y el más furioso es Chucho Morales, porque para variar Melquiades siempre anda de viaje en momentos cruciales de definición política.
¿Con qué cara Chucho Morales señala que hubo represión política si como hermano del entonces gobernador Melquiades Morales fue amo y señor de la comarca?.
¿Acaso no era el secretario de Gobernación, líder del PRI y jefe del gabinete melquiadista sin cartera?.
¿Quién controlaba la SEP, SCT o el Comité Administrador para la Construcción de Espacios Educativos, dependencias donde sus titulares dejaron el cargo en medio de actos de corrupción?.
¿A poco se olvidaron las denuncias hechas en su momento sobre el costo de dos millones de pesos por subsecretaría? ¿Cuánto costaban las candidaturas a regidor, alcaldes y diputados?.
Se olvidan los Morales que en el sexenio pasado en realidad impusieron sus intereses los inmorales y los amorales.
Una y otra vez en distintos espacios informativos se documentaron irregularidades solapadas por Roberto Morales Flores desde la Secretaría de Salud.
Si la pregunta no era otra más ¿qué esperaba el gobernador para cesarlo de sus funciones e iniciarle proceso administrativo?.
Nada más hay que darse una vuelta por los hospitales del sector salud para corroborar la negligencia de un funcionario con la experiencia del doctor Morales en el área.
Pierden de vista que su sexenio se acabó en el 2005 y que el mismo gobierno autoritario que tanto denuncia Chucho tiene en la nómina al pequeño Jesús Morales Rodríguez en la Policía Metropolitana, luego de las anomalías cometidas en Seguridad Vial del Estado.
Quizá la molestia de Chucho sea comprensible porque ya no podrá disponer de las brigadas de salud para sus labores de proselitismo político en el interior de la entidad.
Pero los Morales deberían analizar a quién le favorece una confrontación política entre el marinismo y el melquiadismo. ¿A caso al chilletas?, es pregunta, conste.
Tampoco deben amagar con que lo que queda del melquiadismo se declarará en rebeldía contra el PRI por dos razones:
1.- Los Morales le deben todo al PRI.
2.- Los melquiadistas desde hace meses operan a favor de Rafael Moreno Valle Rosas, senador por cierto del PAN.
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