1.- En los días de la grandeza López Portillista, a la salida del recién inaugurado Museo de la Venta, un joven encantador detuvo al tabasqueño, maestro, poeta, activista comunista (incluso encarcelado) que fue Carlos Pellicer Cámara, invitado expreso a esa ceremonia, y le espetó: Maestro usted y yo tenemos dos cosas en común. ¿Cuáles son, maestro? Repuso el también creador único del Museo de Tepotzotlán, Morelos.
1.1.- Una, dijo el joven: Soy poeta, la otra: soy homosexual. La respuesta de Pellicer dejó frío al señor Presidente de la República testigo fiel de la escena: No maestro, solo nos parecemos en una: Somos poetas. El homosexual soy yo: Usted es un pinche puto.
Así bajo riguroso criterio debemos distinguir a los vendedores de fuerza de trabajo magisterial.
a).- Hay enseñantes: aquellos que ingresaron al servicio magisterial sin ninguna vocación para transmitir valores, conocimientos e información para reproducirlos (Larroyo). Lograron su plaza de trabajo sólamente para poder obtener un ingreso digno para ellos y sus familias, deseo legítimo en un país capitalista donde la venta de trabajo es lo único válido para la sobrevivencia.
Estos son tan irresponsables que cuando son enseñantes de educación superior en tecnológicos, presumen de tener conocimientos industriales, casi secretos, y afámanse ante los alumnos que no los vierten, pues es fruto de su experiencia en fábricas cuando jamás en su vida han trabajado en otra actividad que no sea la de enseñantes.
b).- Carecen de aptitud para transmitir conocimientos y valores, pues ella parte de una disposición personal donde la entrega social es indispensable. Se encuentran ahí por un accidente histórico donde una democracia electoral patrimonializa todos los actos de todos los tipos de gobierno de todos los partidos.
c).- No se encuentran comprometidos dentro del proceso educativo pues carecen de información, de comunicación, no se han politizado, ni mucho menos ideologizado.
2.- Los profesores generalmente poseén alguna, no todas de las características necesarias aquí arbitrariamente señaladas por los expertos en enseñanza. Digno es destacar que aún con esta cojera de corte intelectual otorgan lo mejor de ellos para su alumnado.
3.- Ser maestro es entregar la zalea diariamente sobre todo si se trabaja en las áreas deprimidas económicamente, pues enseñar el A, E, I, O, U, o el alfabeto a cincuenta o sesenta alumnos mal alimentados, sin una cama ni techo digno para hacer la tarea, en ambientes deprimidos y deprimentes, donde el 70% de las familias nacionales no tienen acceso a vender su fuerza de trabajo para poder vivir, es una tarea titánica, que sin embargo la realizan cientos de miles de transmisores de valores universales, conocimientos científicos y tecnológicos, con la alegría que otorga un trabajo convertido en placer. Sólamente el transmisor de ideas y conceptos que sonríe al terminar su tarea sabe si es enseñante, profesor o maestro.
4.- La prueba de enlace fue un acuerdo entre una cúpula sindical nacida del ejercicio antidemocrático, con un gobierno cúpula de una democracia electoral. Tócale a la sociedad organizada opinar sobre tales acuerdos.
Salvo su opinión.